Jamila Hardwick es una azafata que decidió contar en un programa de televisión estadounidense algunos secretos de lo que ocurre en vuelos comerciales y enumeró algunos consejos para los pasajeros como por ejemplo evitar tomar café y té en los aviones.
Una azafata reveló porqué no hay que tomar café en los aviones
Hardwick fue entrevistada para el ciclo "Inside Edition" en Air Hollywood, un estudio de Los Ángeles montado especialmente para realizar películas que tratan sobre aviones y aviación en general. "Lo que pasa con el café y con el té, es que los depósitos de agua rara vez se limpian", aseguró la azafata que prefirió mantener en secreto el nombre de la aerolínea en la que trabaja.
En ese sentido, y para reforzar la idea contó que ni los pilotos ni el resto de la tripulación toman jamás esas infusiones. Lo recomendable es pedir bebidas que ya vienen envasadas.
Hardwick también se refirió al estado de las mantas y las almohadas que se reparten para el descanso de los pasajeros en cada vuelo. "Es mejor que cada uno traiga las suyas. Aquí estas cosas se lavan, pero no estamos muy seguros que tan bien lo hagan".
También, en relación a la limpieza y los gérmenes que puede llevar el avión en determinades lugares, la azafata que revela los secretos indicó que las bandejas que se bajan para apoyar las bebidas o las comidas también están repletas de ellos. "Es mejor que cada pasajero traiga una toallita de limpieza descartable y la usen antes de apoyar cualquier cosa allí", señaló.
La mujer también explicó porqué no hay que pedirles a los y las asistentes de vuelo que ayuden a los pasajeros a guardar el equipaje cuando recién ascienden a la aeronave. "A nostras no nos pagan hasta que la puerta de embarque esté cerrada. Si nos lastimamos al poner un bolso o una valija en el compartimento, no podemos pasarla como una lesión de trabajo", relató Hardwick
Finalmente, la mujer aseguró que siempre es bueno ser amable con las azafatas. "Si nos tratan con amabilidad, es más probable que los ayudemos a encontrar un mejor asiento y tal vez puedan obtener una bebida extra o dos", finalizó.
Es claro que las declaraciones de Harwick no pasarían desapercibidas y provocarían revuelo. La organización A4A (Aerolíneas por América), que reúne a las compañías aéreas norteamericanas salió a aclarar su posición tras los dichos de la azafata. "La seguridad de los pasajeros y la tripulación incluye también el suministro de agua potable y servicios. Los sistemas de agua a bordo se llenan con agua de los servicios de agua de cada ciudad, que es la misma que se utiliza en todo aeropuerto, incluso para restaurantes, y se distribuye a hogares, empresas y comunidades locales todos los días".
"Las aerolíneas trabajan en estrecha colaboración con la Agencia de Protección Ambiental (EPA) para garantizar que el agua recibida de los municipios sea segura y para mantener esa seguridad siguiendo rigurosos requisitos de muestreo y gestión, que incluyen la desinfección y el enjuague de los tanques de agua de la aeronave en un horario requerido por la regulación".
A4A también aclaró sobre la higiene del interior de los aviones: "Las aerolíneas trabajan continuamente para garantizar un área de cabina limpia y cómoda para sus pasajeros, ya que los transportistas saben que la limpieza de la aeronave es importante para los clientes cuando toman las decisiones para sus viajes".