En las primeras horas de este jueves se llevaron a cabo distintos allanamientos por parte de la Tropa de Operaciones Especiales en la zona noreste de la vecina ciudad de Recreo, en busca de pruebas del homicidio de Diego Román, el nene de 12 años que fue encontrado muerto el 4 de julio de 2019 en un descampado.
Cuatro personas fueron trasladadas a Santa Fe para declarar en la causa del homicidio de Diego Román
Según informa el portal FM Power Max, los fiscales que entienden en la causa obtuvieron fuertes datos que han permitido acelerar y dar un giro a la investigación en cuestión de horas y solicitaron los allanamientos a las fuerzas especiales de la policía de la provincia. Como resultado, cuatro personas fueron detenidas y trasladadas desde Recreo hasta la ciudad de Santa Fe para declarar por la causa de Diego Román
Los allanamientos se han realizado en un radio que no supera los 500 metros de donde encontraron el cuerpo del menor durante la noche fría del 4 de julio del año pasado, cuando varios vecinos de la ciudad se organizaron en grupo para encontrar a Dieguito.
Los individuos fueron trasladados a la ciudad de Santa Fe para prestar declaración y así conocer si están o no vinculados al hecho, según pudo informar el MPA a RADIO 104.5
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La muerte de Diego
Diego Román, de 12 años, comenzó a ser intensamente buscado desde el miércoles 3 de julio de 2019, cuando no regresó a su casa luego de ir a la escuela, en Recreo, ubicada a unos 17 kilómetros de la capital santafesina.
Su padre realizó la denuncia en la Comisaría 16ª de esa localidad y un día más tarde el vicepresidente del Club Social Central Oeste, donde el niño jugaba al fútbol, encontró su cuerpo entre la vegetación de un descampado cercano a su casa.
En un primer momento se apuntó a un homicidio producido con un elemento punzocortante. Oportunamente, el médico forense y docente universitario Pascual Pimpinella explicó que en la primera autopsia detectaron la presencia de heridas cuyos bordes eran "muy netos", lo cual abonaba la teoría de que habían sido producidas con un elemento filoso.
Hubo una segunda autopsia que fue realizada por el equipo de especialistas del Poder Judicial de la Nación. Al cumplirse un año de la muerte del niño, los fiscales Andrés Marchi y Ana Laura Gioria a cargo de la investigación explicaron en un comunicado público que luego de la presentación de las muestras de ambas autopsias, “se concretó la identificación y toma de muestras bucales y de pelos a perros. Fueron recolectados en dos viviendas cercanas al lugar en el que se encontró el cuerpo de la víctima y fueron remitidas a los especialistas nacionales para el análisis de ADN”.
Los fiscales manifestaron que “se espera que los estudios de ADN nos permitan obtener perfiles genéticos humanos y/o de origen animal” y advirtieron que “estos peritajes se complejizan cuando se trata de establecer perfiles de origen animal”.