El rally de Trancas terminó dejando un saldo más que positivo en su primera incursión en el campeonato nacional. Los pilotos quedaron conformes con las características de los caminos, y si bien, las roturas de neumáticos estuvieron a la orden del día, sobre todo en la primera etapa, la localidad tucumana mostró lo mejor de la geografía de esa provincia para el desarrollo del evento. Finalmente, el neuquino Alejandro Cancio (Škoda Fabia R5) se quedó con el primer puesto en la clasificación general, resultado soñado para el propietario del CB Tech Rally, que aprovechó también los abandonos de Juan Carlos Alonso (bomba de nafta) y de Marcos Ligato (correa del motor) para desprenderse definitivamente en el torneo y encaminarse a su primer campeonato nacional.
Alejandro Cancio, por arriba de las piedras
Por Matías Russo

Nicolás Diaz (Ford Fiesta MRT) no solo fue su escolta en la general, sino que también se llevó una importante victoria dentro de la RC2N, donde se encuadran los coches Maxi Rally. Esta situación le da un espaldarazo importante en sus ansias de retener la corona lograda en el 2020 luego de un principio de año irregular. También hay que destacar lo realizado por Gastón Pasten (Volkswagen Polo MRT) que logró recuperarse de problemas de turbo que lo aquejaron el sábado para pasar del sexto puesto al segundo en la divisional, donde, además, accedió al podio de la general de la carrera. Los problemas en el auto del neuquino Martín Suriani en los últimos kilómetros hizo que sanjuanino pueda subir rápidamente y seguir danto batalla dentro del campeonato de la divisional.
Los que no tuvieron todas consigo fue el entrerriano Leandro Bonnin que el sábado fue la sorpresa de la carrera y Claudio Robustelli que una salida del camino obligó a parar la prueba especial 5 de la competencia.
En el resto de las clases, el tucumano Tomás García Hamilton ganó en su casa dentro del RC2N con una importante diferencia de 2.25,4 minutos sobre su coterráneo Miguel Reginato. El tercer puesto del catamarqueño Antonio Prevedello lo mantiene en la punta de la categoría.
En la divisional Junior se vivió una extraordinaria carrera entre Victorio Ballay y el cordobés Germán Galfrascoli. Ambos pilotos nunca estuvieron separados por más de 3 segundos en toda la carrera y la definición quedó para el entrerriano quien terminó venciendo por tan sólo 9 décimas en una de las definiciones más cerradas de la historia.
La divisional RC5 quedó en manos del cordobés Damián Ibarra quien superó por poco más de 13 segundos a Gabriel Cerutti. Gastón Pedrido completó el podio. La Copa Senior fue para Walter D´Agostini y la Copa Pirelli para el riojano César Folledo.