Tras los rumores que la vincularon con DJ Memo y un secretario de Ricardo Fort, finalmente se conoció que Charlotte Caniggia tiene novio pero no de estas latitudes sino que su festejante es un eslovaco que actualmente reside en Suiza de nombre Jan Aleksandar Tibai.
¡Piedra libre!
Según la revista Pronto, Tibai tiene 29 años y es oriundo de Bratislava, la capital de Eslovaquia. Hijo de una familia adinerada, se mudó de chico a Zurich, la principal ciudad de Suiza, en la que aún reside.
Sin embargo, el joven tiene similitudes con Charlotte ya que se viste en las tiendas más exclusivas del mundo, como Gucci, Burberry y Tommy Hilfiger, y habla múltiples idiomas: inglés, francés, eslovaco, español y alemán. Además, ama salir a bailar con sus amigos cada vez que tiene tiempo libre.
El noviazgo comenzó hace más de dos años, cuando Jan entró en la vida de Charlotte porque era uno de los mejores amigos de su gemelo Alexander. Tal era la confianza que el hijo de Caniggia invitó a Tibai a pasar unos días en su mansión de Marbella, y ahí fue donde se produjo el flechazo con ella. En 2010, Jan viajó a la paradisiaca playa española con amigos, y fue entonces cuando se puso de novio con la hija de Mariana Nannis.
Si bien Tibai tiene dinero y se crió en un ámbito parecido al de Charlotte, su ocupación es la de boxeador. El chico se formó y pelea en Boxclub Zürich, en 2009 fue finalista en el Campeonato Nacional Juvenil de Box en Suiza, y actualmente se dedica a boxear profesionalmente. En realidad, en este momento está en un parate en su profesión, puesto que entró como recluta de la Escuela de Tanques N° 21, en Suiza. Tibai está en el ejército suizo, y participa de un entrenamiento intensivo de 21 semanas para manejar tanques Panzer.
Charlottte lo fue a visitar el 5 de abril pasado y él subió a Facebook una foto que le sacó sentada en un sillón junto al comentario "Love you baby". El mes siguiente, Caniggia volvió a Zurich de visita, y como Jan tenía el fin de semana libre, la invitó a comer afuera y pasearon su amor por la ciudad. Un amor a distancia.
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