El estado calamitoso de uno de los camiones recolectores de residuos

Esta semana arrancó con una medida de fuerza de 24 horas por parte de los trabajadores de Cliba, por lo que en la ciudad no hubo recolección de residuos el lunes. La medida la llevaron adelante los propios trabajadores quienes manifestaron que no contaban con los elementos en condiciones para poder prestar su servicio.

A lo que ellos hacían referencia es que del total de la flota de camiones con la que cuentan para realizar la recolección diurna y nocturna y dos veces a la semana la que refiere a la poda por la tarde, estaban en su mayoría fuera de servicio por problemas mecánico. Solo contaban con cinco unidades para trabajar, mientras que otras 11 estaban para reparar.

A eso debe sumarse la denuncia hecha por los trabajadores en octubre del año pasado y durante una puja de la empresa con la anterior gestión municipal, por una deuda con la prestación del servicio, la decisión de Cliba de llevar los camiones más nuevos a la ciudad de Buenos Aires y enviar a Santa Fe otros más viejos.

Tras la medida de fuerza, los mismos delegados de los recolectores manifestaron que los camiones se retiraron del lugar para ser reparados y así prestar el servicio. Pero hoy por la mañana, una imagen que comenzó a circular, otra vez encendió las alarmas. Un camión con sus trabajadores comenzó a largar humo en medio de su recorrido y a la vista de todos, dejando en evidencia así el reclamo realizado por los trabajadores.