Este sábado, alrededor de las 20, vecinos del barrio San Agustín II vivieron una noche de terror. En calle Santa Cruz al 7200, una feroz balacera dejó como saldo cuatro jóvenes heridos de arma de fuego. Tres de ellos quedaron tendidos en la vía pública y fueron socorridos por personal médico tras la intervención de varias unidades policiales. El cuarto herido apareció minutos después.
"Parecía una guerra": feroz tiroteo dejó cuatro heridos en barrio San Agustín II
El sábado por la noche, una lluvia de disparos sembró el pánico en calle Santa Cruz al 7200. Tres jóvenes quedaron tirados en la calle y luego se sumó un cuarto herido. Vecinos denuncian que la pelea por el control de la venta de drogas está detrás del brutal enfrentamiento.

Por Juan Trento

La secuencia comenzó con llamados desesperados al 911, en los que los vecinos pedían con urgencia presencia policial y ambulancias. En pocos minutos, la zona se llenó de patrulleros: intervinieron efectivos de Orden Público, del Comando Radioeléctrico, del Cuerpo Guardia de Infantería (CGI) y de la Policía de Acción Táctica (PAT), además de personal de la Subcomisaría 17ª.
Mientras las ambulancias del SIES 107 ingresaban por Santa Cruz y por Los Negruchos, el clima en el barrio era de espanto. “Parecía una guerra”, coincidieron los vecinos que hablaron con los agentes. En medio de los gritos de auxilio de los heridos, algunos testigos contaron que los jóvenes solo estaban caminando por la zona cuando fueron alcanzados por los disparos.
Los tres heridos iniciales fueron trasladados al hospital Iturraspe. Fueron identificados como:
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Lázaro Isaías Servidio (20), con heridas de bala en brazos y piernas,
Nicolás Cañete (21), con impactos en las piernas,
Ulises Montenegro (22), también herido en las extremidades inferiores.
Según el parte médico, ninguno de ellos corre riesgo de vida. Más tarde, se confirmó el ingreso al hospital Cullen de Mauro Noriega, quien presentaba una fractura expuesta por un disparo. Fue operado y permanece internado en observación.
Narcomenudeo
Las primeras hipótesis policiales vinculan el violento tiroteo con disputas territoriales por el narcomenudeo. Aunque los heridos negaron estar involucrados en el hecho, los investigadores no descartan ninguna línea.
La fiscalía de Flagrancia del Ministerio Público de la Acusación quedó a cargo del caso. Solicitó:
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informes sobre el estado de salud de los heridos,
la búsqueda de testigos,
el relevamiento de cámaras de videovigilancia públicas y privadas en la zona.
Además, personal del área científica de la Policía de Investigaciones (PDI) realizó los peritajes criminalísticos en la escena del hecho.
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