Ante las reiteradas ocasiones que en el Diario El Litoral se publicaron opiniones negativas (atribuidas a “los vecinos”) acerca de la apertura de un paso peatonal que atraviesa la estación terminal de ómnibus y el reclamo de reponer un tramo del cerco que la separa del parque que está a sus espaldas, como vecino del barrio (que lleva más de tres décadas observando sus transformaciones) me interesa expresar lo siguiente:
Paso peatonal en la Terminal de Ómnibus: el sendero de las opiniones que se bifurcan
1- En primer lugar, celebro la renovación de la Terminal de Ómnibus, era necesaria y vino a poner en valor un edificio que aún conserva vigencia y nobleza constructiva.
2- En cuanto a la apertura mencionada, al contrario de las opiniones vertidas en el medio citado, considero que es un hecho positivo, tanto para una gran parte del sector del barrio que está bloqueado por la extensión de la terminal (que de este modo se reintegra con “el otro lado de la ciudad” y ve favorecida la comunicación peatonal), como para el público en tránsito, que si lo desea puede realizar la espera en el parque en lugar de hacerlo en el hall o en las dársenas. Hay que recordar que el cerco no estuvo siempre, hubo una época en que una línea de cadenas a baja altura apenas delimitaba el sector en todo su largo, y entonces no se lo consideraba un problema.
3- Respecto de las críticas a esa apertura por cuestiones de seguridad considero que son infundadas. Mientras más gente circule por el lugar mayor será el control sobre lo que pueda suceder (“los ojos en la calle” —según propuso Jane Jacobs en su libro Muerte y vida de las grandes ciudades— son la base y sostén del sentido de comunidad, de pertenencia al vecindario y de responsabilidad social); por lo opuesto, todo aquello que separa, cierra y obstaculiza es propenso a ser tomado como refugio para el ocultamiento y, en consecuencia, propiciar actividades indeseables.
4- A los comentarios sobre la instalación de personas en situación de calle, que utilizan el parque como albergue, respondo que no es algo que se haya desarrollado a causa de esa apertura, sino que se viene produciendo desde hace bastantes años y se incrementó notablemente después del confinamiento por la pandemia, como se ve también en otras partes de la ciudad. Es un problema social que tiene otras causas y requiere de otro tipo de soluciones.
5- Coincido con las críticas formuladas sobre el estado general del predio, pero señalo que eso tampoco obedece a la apertura realizada ni al sendero en cuestión, es un tema que se debe resolver poniendo mayor atención a la limpieza (es notable la cantidad de residuos dispersos en toda la extensión), al cuidado y mantenimiento del mobiliario urbano, y al desmalezamiento, la atención del arbolado y el corte de pastos con la adecuada frecuencia. Si a ello se sumara un mayor equipamiento de alumbrado, que asegurase una eficaz iluminación nocturna del área, la ciudad podría contar con un parque lineal de características particularmente interesantes, que haría posible el disfrute y la convivencia segura entre vecinos, paseantes y viajeros, en un ambiente que sin duda aportaría mayor calidad de vida al paisaje urbano.
Luis Müller
DNI 11.377.768