Luego del fuerte temporal que azotó a Santa Fe el pasado martes, se reavivó la polémica por el funcionamiento de las estaciones de bombeo del cordón oeste. Desde la oposición en el Concejo Municipal y también desde el gremio municipal Utram se cuestionó el estado de las denominadas “casabombas” y se apuntó contra una presunta falta de personal e inversión para garantizar su mantenimiento.
Temporal: el municipio defendió el funcionamiento de las estaciones de bombeo y admitió dificultades por las hojas que obstruyen los drenajes
Concejales opositores y el sindicato municipal advirtieron sobre la falta de mantenimiento. Desde el Ejecutivo aseguraron que las casas bomba "funcionaron al 100%"

José Busiemi
En respuesta, el Ejecutivo local aseguró que el sistema de bombeo funcionó correctamente y que las estaciones operaron de manera efectiva durante la tormenta.
“No vamos a decir que no va a haber problemas cuando hay tormenta. Lo sabemos y damos la cara. Pero sí sabemos que en 48 o 72 horas, salvo casos severos, el agua baja y los lugares se normalizan”, indicó el intendente Juan Pablo Poletti, y agregó que ya se están elaborando informes técnicos para responder al pedido de información presentado por ediles de la oposición.
En paralelo, desde el sindicato Utram denunciaron que “las estaciones del cordón oeste se encuentran en estado precario” y reclamaron la conformación de un “departamento para monitoreo y prevención de lluvias intensas”. También señalaron que los trabajadores encargados de operar las estaciones enfrentan condiciones laborales difíciles y con poco refuerzo de personal.
El sistema
Desde el Ejecutivo municipal, en cambio, defendieron el funcionamiento del sistema. “Las casabombas trabajaron al 100% durante la tormenta. Fue muy importante y se puede constatar con datos. El sistema es complejo pero ha sido muy efectivo en Santa Fe, y lo seguirá siendo en las próximas lluvias”, afirmaron.
En cuanto a los inconvenientes vinculados al anegamiento de barrios, el municipio reconoció las limitaciones estructurales y estacionales. “La limpieza se realiza de forma anticipada. Desde el jueves pasado estamos trabajando sobre los canales a cielo abierto, retirando basura y hojas. Pero hay un factor que no depende del municipio y es el otoño: cuando llueve, las hojas que estaban en los árboles caen todas juntas y obstruyen los drenajes, incluso si se limpiaron horas antes”, explicó el intendente.
Pese a las tareas preventivas, admitieron que hay sectores donde no se podrá evitar la acumulación de agua durante las lluvias fuertes. “Puede haber 30 o 40 centímetros en algunos momentos, pero queremos estar presentes para que esa agua salga lo antes posible del barrio. Vamos a trabajar a destajo para lograrlo”, aseguraron desde la gestión local.