La beba chaqueña Luz Milagros, aquella que cuando nació la dieron por muerta y pasó 12 horas en la morgue con escarcha a su alrededor, ya casi respira por sus propios medios y está cerca de volver a su provincia, junto a su familia.
Luz Milagros pesa más de dos kilos y sigue recuperándose

Luz, que nació el 3 de abril a los seis meses de gestación con 840 gramos, ya pesa 2,150 kilos. Su mamá, Analía Boutet, está con ella en el hospital Italiano de Buenos Aires desde fines de mayo, cuando fue trasladada. Anteayer le retiraron los antibióticos y la bomba que le suministraba leche cada dos horas ahora lo hace cada 60 minutos.
"Está con el respirador en funcionamiento o sea que ella está respirando sola, sólo de vez en cuando le da un empujoncito", comentó Boutet y agregó: "Está en entrenamiento para poder dejarlo otra vez". Es que en sus cuatro meses de vida, a Luz lograron en algunas ocasiones quitarle el respirador, pero las recaídas obligaron a su reconexión. La chiquita superó en ese tiempo un paro cardiorrespiratorio, convulsiones, hemorragias e infecciones. Si bien sus funciones vitales mejoraron, su cerebro funciona sólo al 10 por ciento y el daño, consideran especialistas, sería irreversible.
Al respecto, Analía sostiene que la beba "está con muchas estimulaciones. El tiempo y Dios dirán qué determinará para su vida. Lo importante es la vida y nosotros estamos para acompañarla".
Mientras tanto, Analía disfruta de cada gesto, de cada contacto. "Cuando está dormida, yo le hablo y ella empieza a parpadear, a despertarse", contó. Y agregó: "Cuando la alzo y la saco de la incubadora se pone a mirar todo, ve que hay un mundo afuera".