Por fraude al Estado Nacional, dos hombres oriundos de la ciudad de Buenos Aires comenzaron a ser juzgados en el Tribunal Oral Federal de la ciudad de Santa Fe esta mañana. Se trata del ingeniero Miguel Ángel Dubarry (71) y del abogado y exrector de la Universidad de Lomas de Zamora, Carlos Mario Clerc.
Juzgan en Santa Fe a un ingeniero y a un exrector universitario por defraudación al Estado
Ambos profesionales fueron procesados por el juez Francisco Miño por haber sido beneficiados con un amparo judicial presentado en el Juzgado Federal N° 1, a cargo de Reinaldo Rodríguez, que ordenó que se le pague una serie de bonos post default adquiridos en el 2003.
El juicio comenzó pasadas las 9.30 en el edificio del tribunal federal -Primera Junta y San Jerónimo. Previo al inicio del debate, los imputados, por medio de sus abogados defensores, solicitaron la suspensión del juicio a cambio de realizar una probation en una parroquia de Capital Federal, situación que fue rechazada por el mismo fiscal general, Martín Suárez Faisal.
El tribunal de jueces compuesto por Luciano Homero Lauría, José María Escobar Cello y María Ivón Vella realizó un cuarto intermedio y luego de unos quince minutos resolvió hacer lugar al pedido de la Fiscalía por lo que la solicitud de la defensa fue rechazada. De todas maneras, Néstor Oroño, el abogado de Dubarry, anticipó que presentará un recurso de inconstitucionalidad. En la misma sintonía asintió el defensor de Clerc, Juan Carlos Palacios.
El único que habló al tribunal
Antes de comenzar el debate quien declaró ante los jueces fue el mismo Clerc, que presentó el amparo judicial para que el juez Rodríguez ordene el pago de los bonos, los cuales, en ese entonces, no podían cobrarse debido a una serie de resoluciones y decretos dictados por el Ministerio de Economía tras la emergencia social después del 2001.
En sus dichos, el letrado porteño explicó que conoció a Fernando Bugnard (otro imputado que falleció) como un mero cliente ya que el mismo acudió a sus conocimientos en la materia para poder cobrar los bonos.
"El amparo fue típico y no fue un engaño a nadie", sostuvo ante los jueces Clerc. "El Estado cuando se tuvo que defender no lo hizo", indicó el abogado. "Yo no engañé a nadie, yo no cometí ningún ardid", sentenció y concluyó en que no iba aceptar preguntas del fiscal.
Salud avanzada y un baldío: las claves
La causa que llegó a juicio en la jornada de hoy se inició el 21 de octubre del 2005 luego de una denuncia radicada en la Fiscalía Federal N° 1 de Santa Fe por el entonces subsecretario legal del Ministerio de Economía y Producción de la Nación, Osvaldo Siseles. En dicha denuncia, el exfuncionario explicó que el fallo judicial, que ordenó pagar al Ministerio de Economía de la Nación una suma de $ 649.023,76 a Dubarry, fue en base a un amparo judicial que se presentó en el estrado federal de manera "irregular".
Esa irregularidad fue detectada en base a dos puntos claves. Uno fue que el propio Dubarry incorporó como cocomitante de la cuenta a Fernando Bugnard, un hombre de avanzada edad.
A su vez, el domicilio declarado por Bugnard fue uno en la ciudad de Rafaela, pero cuando se peritó, se descubrió que se trataba de un baldío.
El fallo
El amparo judicial por el cual hoy Clerc y Dubarry se encuentran en el banquillo de los acusados determinó declarar la inconstitucionalidad de los decretos 471/2002, 316/2002, ley 25.725, ley 24.624 y las resoluciones del Ministerio de Economía 73/02 y 156/2003, que obligaron a que el Estado pesifique y suspenda el pago de bonos de la deuda pública tras la crisis del 2001.