Llega mediados de enero y en la ciudad de Santa Fe comienzan los mismos comentarios de siempre: ¡nos invadieron los grillos! Es que tanto en las casas como los espacios verdes tradicionales se puede ver un gran número de estos insectos, que a más de uno por la noche no deja dormir con su cricrí, cricrí.
Como todos los años en esta época, los grillos invaden la ciudad de Santa Fe

Si bien es normal la cantidad de grillos para la ciudad en esta época, también el clima: el calor y la humedad facilitan su reproducción, sobre todo la llegada de las lluvias copiosas y en corto tiempo hacen que los huevos eclosionen.
Según los especialistas, las temperaturas muy altas, lluvias intermitentes y bastante seguidas, hace que los huevos que están colocados para madurar a lo largo de todo el verano, se desarrollan en el transcurso de pocos días y obviamente hace que haya más cantidad de estos insectos, los cuales se debe decir, no transmiten enfermedades, no pican o muerden.
"Simplemente, lo que hacen es su ruidito característico que tiene que ver con la llamado del amor”, afirmaron y explicaron que “el cricrí” (grillar) de los grillos machos se produce cuando estos “frotan sus alas contra las patas posteriores y lo que está haciendo es llamar a la hembra. Es una forma de tener un acercamiento para la posterior reproducción para la continuidad del ciclo biológico”.
Si bien puede ser un problema que los grillos ingresen a los hogares, se recomienda tomar las medidas para evitar esa situación como por ejemplo burletes debajo de las puertas, telas metálicas, que no solamente va a servir para los grillos, sino para alacranes y cucarachas.
Otro punto y es lo que relaciona la idea de que los grillos atraen a los alacranes, hay que decir que si bien el alacrán es un "bichito" cazador, el animal por más que sepa que haya o no grillos, va a andar mucho, sobre todo de noche y es muy raro que vea lo que va a ser su presa.