Hace 10 días la Cámara de Diputados dio media sanción, por unanimidad, al mensaje del Poder Ejecutivo a través del cual se establece la creación de la Corporación Santafesina para la Promoción y Desarrollo de la Economía Provincial, cuyo objetivo es promover el crecimiento del sector productivo. La iniciativa tiene un alto consenso en la Legislatura, pero en el Senado los representantes radicales tienen un proyecto propio donde pretenden aumentar el capital inicial para inversiones.
El Estado avanza en la creación de una herramienta financiera
En tal sentido, el ministro de la Producción de Santa Fe, Juan José Bertero, explicó sobre la iniciativa del gobierno que técnicamente no se creará un banco sino una unidad que servirá para ejecutar recursos que quedaron disponibles luego de la liquidación del Banco Santafesino de Inversión y Desarrollo. En principio, se trata de sólo 6,5 millones de pesos en efectivos que ya están depositados en el actual agente financiero de la provincia (NBSF) y otra suma similar a punto de cobrar.
La idea de tener una corporación financiera es para comenzar a apoyar proyectos productivos, en función de que la privatización del viejo Banco Provincial de Santa Fe dejó sin ningún tipo de herramienta crediticia al Estado. Además, según consta en el texto aprobado en Diputados, se plantea un plazo de dos años para darle el formato institucional definitivo, aunque el Ejecutivo adelantó que quiere que la mencionada unidad sea mixta (capitales públicos y privados en partes iguales).
Sin embargo, cuando los acuerdos políticos entre oficialismo –básicamente el socialismo– y oposición parecen haber encontrado un carril institucional proactivo, desde el radicalismo (que negocia lugares y posiciones de poder en el futuro gabinete de Antonio Bonfatti) reingresaron un proyecto que había perdido estado parlamentario este año y ahora pretenden que también se analice. Dicho texto cuenta con el aval de Felipe Michlig (San Cristóbal), Federico Pezz (General López), Rodrigo Borla (San Justo), Eduardo Galaretto (San Lorenzo) y Héctor Aquino (Constitución).
El proyecto de ley de los legisladores de la UCR propone crear como sociedad del Estado la Corporación Santafesina para la Promoción y Desarrollo de la Economía provincial con un capital inicial de 50 millones de pesos, constituido con el producido del cobro de deudas del ex Banco Provincial de Santa Fe Sapem y los fondos resultantes de la liquidación del ex Banco Santafesino de Inversión y Desarrollo, además de los recursos del propio Poder Ejecutivo.
Otra reforma importante respecto del primer texto que presentó Michlig en 2009 está referida a la composición del directorio. Se mantiene el esquema de una sociedad del Estado que tendrá dependencia directa del gobernador de la provincia, cuyos directores serán los ministros de Economía y de la Producción, y dos representantes del sector privado –uno surgido del sector agropecuario y el restante de los centros comerciales e industriales de la provincia–, a los que habrá que sumar cuatro legisladores (dos por cada una de las cámaras legislativas).
Vacío de instrumentos
La creación de una institución de las características de una corporación financiera fue establecida en los artículos 33 y 34 de la Ley Provincial Nº 11.696 (de Emergencia Económica y Previsional), pero tanto el gobierno que promulgó dicha norma como los que lo sucedieron no enviaron a la Legislatura el proyecto respectivo. Sí una iniciativa, autoría del entonces diputado provincial Jorge Giorgetti, tuvo durante dos períodos media sanción de la Cámara baja, pero en ambas ocasiones no fue tratada por el Senado santafesino.
“Teniendo un vacío de instrumentos financieros del Estado provincial, ligados a su importante actividad productiva, como consecuencia de la privatización del Banco Provincial y la liquidación del Santafesino de Inversión y Desarrollo, se plantea la necesidad de creación de esta sociedad del Estado”, expresaron los senadores radicales a modo de exposición de principios en su proyecto.
A su vez, los dirigentes radicales indicaron que el funcionamiento de la corporación “no deberá implicar la creación de ningún cargo presupuestario ni el aumento de partida alguna en el rubro bienes y servicios, gastos de funcionamiento o bienes de capital, ya que para el desarrollo de las actividades específicas asignadas se deben afectar partidas correspondientes a las unidades de funcionamiento existentes (recursos de la liquidación y cobro a deudores)”.
También, “se faculta al Ejecutivo provincial a reglamentar la ley en un lapso que no exceda los plazos establecidos por las normas legales, incluyendo en el decreto el procedimiento para la distribución de los fondos, que deberá contemplar la intervención de las Asociaciones para el Desarrollo Regional y/o una entidad financiera legalmente constituida, así como la forma y plazo de recupero de los aportes efectuados”.
Además, deberá definir la participación e integración a la corporación de las distintas zonas o regiones de la provincia por medio de sus centros comerciales e industriales, y las Secretarías de la Producción de Municipios y Comunas a través de distintas instancias, como una Unidad de Seguimiento, Control y Apoyo a los Emprendimientos y otra de Evaluación de Proyectos.
“Lo que se pretende con la creación de la corporación, es que cumpla el rol de fomento al sector productivo que el Estado provincial nunca debió abandonar, como lo hizo en la década de 1990, cuando los gobernantes se plegaron a las políticas neoliberales y privatistas y vendieron muy por debajo de su valor a la institución que fuera orgullo de los santafesinos, el Banco Provincial de Santa Fe, y liquidaron el Santafesino de Inversión y Desarrollo”, expresaron Michlig, Pezz, Borla, Galaretto y Aquino en los fundamentos.