Muchas personas alrededor del mundo recurren a las técnicas de reproducción asistida con el fin de convertirse en padres, en manos de los mejores médicos expertos en este tipo de tratamientos. Asimismo, las clínicas especializadas dichos procedimientos también cuentan con profesionales en psicología que dan acompañamiento y contención emocional durante el proceso. Así, se aseguran de brindar una atención integral.
Las 4 técnicas de reproducción asistida más comunes en la actualidad

La fecundación in vitro (FIV), la ovodonación, la inseminación artificial y la preservación de la fertilidad son solo algunas de las técnicas de reproducción asistida más utilizadas en la actualidad. Cabe señalar que en todas se usa la última tecnología para aumentar las posibilidades de conseguir un embarazo sano. A continuación hacemos un repaso por las más comunes y te explicamos en qué consiste cada una de ellas.
FIV y otras técnicas de reproducción asistida
Antes de entrar en materia, es importante definir qué son las técnicas de reproducción asistida(ART, por sus siglas en inglés). Estas se refieren al conjunto de tratamientos y procedimientos que se llevan a cabo con el fin de lograr un embarazo exitoso.
Se trata de procedimientos que pueden ser una opción efectiva para personas que ya pasaron por distintos tratamientos para la fertilidad, pero que todavía no logran un embarazo. Si bien son procedimientos complejos, hoy día existen médicos especialistas en las técnicas más avanzadas de reproducción asistida que están preparados para intervenir en cada caso.
No obstante, es importante consultar a un profesional de la salud que evalúe las posibilidades de iniciar uno de estos tratamientos.
En ese sentido, los principales tratamientos realizados en la actualidad, incluyen:
Fecundación in Vitro (FIV)
Este tratamiento de alta complejidad se realiza en el laboratorio, fuera del cuerpo de la consultante. Consiste en incubar los óvulos y los espermatozoides de la pareja para producir un embrión. Luego, los médicos colocan el embrión dentro del útero de la mujer, donde podrá implantarse para dar lugar a la concepción.
La FIV se divide en cuatro pasos, que incluyen la estimulación ovárica, extracción de óvulos, fecundación en el laboratorio y la transferencia embrionaria.
Ovodonación
Este tratamiento consiste en obtener óvulos de una donante para que la mujer pueda convertirse en madre. El procedimiento inicia con la donación de óvulos, los cuales son fecundados en el laboratorio con el semen de la pareja de la mujer que busca concebir. El esperma también puede provenir de un donante. Cinco días después de la fecundación, el embrión se transfiere al útero materno.
Inseminación artificial
A diferencia de los anteriores, este es un tratamiento de baja complejidad que consiste en introducir espermatozoides previamente seleccionados en el laboratorio, al útero de la mujer. Es muy útil para aumentar las posibilidades de embarazo, es indoloro, de bajo riesgo y ambulatorio.
Preservación de la fertilidad
Muchas mujeres toman la decisión de postergar la maternidad. Para ellas, existe un tratamiento que consiste en la vitrificación de óvulos en el laboratorio para su uso posterior cuando deseen ser madres. Su principal ventaja es que permite posponer la capacidad reproductiva y la calidad de los óvulos por el tiempo que dure la congelación.
Sin duda, la tecnología actual ayuda a muchas personas a concretar el sueño de un embarazo. Existe una gran variedad de procedimientos y técnicas de reproducción asistida, cada uno con distintas directrices, pero será el profesional de la salud que tras un diagnóstico previo recomiende el tratamiento más adecuado de acuerdo con cada caso.