El exintendente de la quinta presidencial de Olivos entre 2019 y 2023, Daniel Rodríguez, declaró este lunes como testigo en el marco de la causa por presunta violencia de género que denunció la ex primera dama Fabiola Yañez.
El exintendente de Olivos dijo que no vio violencia física y que la relación entre Alberto y Fabiola se deterioró tras la foto de la fiesta
El exjefe de la quinta presidencial prestó declaración ante el fiscal en la causa por presunta violencia de género que denunció la ex primera dama. Aunque dijo que golpes no observó, reconoció que puertas adentro “los ánimos estaban caldeados".
Ante el fiscal federal Ramiro González expuso más de cuatro horas y dijo que "golpes no observó" y tampoco "intermedió en ninguna agresión". Se refirió a una "relación deteriorada" y habló sobre el cambio que se produjo después de la fotografía sobre la fiesta de Olivos.
Según publicó este lunes el diario Clarín, Rodríguez insistió varias veces en que no había visto "personalmente hechos de violencia física" y desmintió haber tenido que intervenir personalmente en una situación de agresión entre Fernández y Yañez. Sin embargo, reconoció que puertas adentro de Olivos “los ánimos estaban caldeados".
El exintendente además advirtió en varias oportunidades que no sabía "qué podía suceder puertas adentro" de la intimidad aunque sí dijo que pudo ser testigo del "deterioro de la pareja".
La relación de Alberto y Fabiola
Dijo que "la relación entre Alberto y Fabiola cambió notablemente luego de la publicación", de las imágenes de la fiesta de Olivos en pandemia y que la "ruptura de la relación entre ellos fue evidente".
Lo único que refirió saber fue sobre un episodio en el que Yáñez se habría caído en una bañera el año pasado.
Rodríguez también afirmó que era un rumor extendido en la quinta que Sofía Pacchi y Alberto Fernández tenían una relación.
La causa
Los primeros dos de los seis testigos citados a declarar por la Justicia fueron la periodista Alicia Barrios y María Cantero, exsecretaria de Fernández, quienes comparecieron el pasado jueves.
Barrios, que según Yáñez conocía bien el día a día de la pareja en la quinta de Olivos y estaba al tanto de las presuntas agresiones, declaró ante el fiscal que existía "violencia emocional" y "maltrato psicológico" por parte de Fernández contra su expareja, pero dijo que no fue testigo de actos de violencia física.
Por su parte, Cantero reconoció que los mensajes de texto entre ella y Yáñez que detallaban las presuntas agresiones eran verídicos aunque, consultada sobre si abordó esta cuestión con Fernández, explicó que no lo hizo "porque era una cuestión de la vida privada".
















