En una entrevista exclusiva con el periodico 'El Español', un sicario ha relatado que los asesinos más baratos son los colombianos que viven en Madrid, ya que -según sus palabras- por 500 euros pueden matar a quien sea y como sea. Sin embargo, según sus palabras, los italianos tienen un precio fijo de 5.000 euros y siempre utilizan el mismo método: dos disparos en la cabeza. Asimismo, según el código de la mafia italiana, nunca matan a mujeres o a niños, explica. Por otra parte, los sicarios más costosos son los que trabajan con el narcotráfico, ya que se embolsan un porcentaje de la droga robada.
Revelaciones de un sicario
El entrevistado, que ha pedido permanecer en el anonimato, solo ha revelado algunos detalles de su vida. O.A., según las iniciales que él mismo ha facilitado, asegura que es italiano y que vive en España desde 1998. Según su relato, aprendió el oficio en su ciudad natal, Nápoles, como exige la tradición familiar.
"He matado entre veinte o treinta hombres", confiesa fríamente O.A. en perfecto castellano, mientras repite una vez más que su código le impide matar a mujeres o niños.
En la entrevista, el sicario da su opinión sobre el brutal asesinato de una familia brasileña el pasado domingo en la ciudad de Pioz (Guadalajara). "No hay duda de que se trata de profesionales, nadie actúa tan fríamente y de forma tan efectiva", asegura. Además, O.A. cree que el crimen está relacionado con el narcotráfico o con un ajuste de cuentas.
Interpelado por el reportero, el sicario explica que a ellos siempre los emplea gente de su propio país. "Es la forma en que el mercado funciona" afirma. En la entrevista O.A. se muestra reticente a la hora de dar más detalles acerca de su profesión, si bien confiesa que "matar en España es barato".
En cuanto a las mafias de otros países, el sicario explica que en Rumanía o Bulgaria suelen cobrar un poco menos que los italianos, pero están especializados en torturas "arrancan uñas, queman la planta de los pies, parten brazos o piernas, meten palizas...", afirma.
Finalmente, el sicario explica que los colombianos han implementado el método de "bajo costo", siendo capaces de matar a quien sea sin cumplir ninguna estrategia prevista. Por contra, los más costosos son aquellos que trabajan con el narcotráfico. " Limpios, discretos, eficaces... Como en Pioz" dice.