El robo de dos caballos en Mendoza, pertenecientes a la Asociación Gaucha Martín Fierro que desfiló en el Carrusel, reavivó una vieja problemática que se da coincidentemente cuando el precio de la carne vacuna aumenta su precio. Y es que el hurto de los equinos es usado en la provincia andina, generalmente y luego de ser faenados, para realizar y comercializar empanadas.
Venden carne de caballo y la disfrazan en las empanadas
Por Valentina Fassi
Lucas Sbriglio es médico veterinario, jefe de Zoonosis de la Municipalidad de Maipú (Mendoza) e integrante de la Agrupación Gaucha Martín Fierro. Justamente la agrupación, que participó del último Carrusel, sufrió el robo de dos caballos. Según Sbriglio el robo no es uno más sino que está íntimamente ligado a los últimos aumentos de la carne vacuna. "En Mendoza sabemos todos quiénes manejan el tema de los robos de caballos, hace poco tuvieron presos a los dos más importantes. Esto va de la mano con el precio de la carne; cuando la carne aumenta, como ahora, empiezan a desaparecer caballos", explicó el funcionario maipucino.
En cuanto al modus operandi de estos ladrones de caballos dijo: "Los robos siempre se producen de noche, a pesar de que la policía rural hace bien su trabajo, se los llevan en algún vehículo y después los faenan".
"Las carnes molidas que se usan para hacer empanadas provienen de estos robos, se vende la docena muy barata, las blandas se han ido a más de 300 pesos y la docena de empanada sigue costando 100 o 120 pesos, no dan los números", agregó.
En cuanto a las diferencias de vista, estética y gusto con respecto a la carne de vaca sostuvo: "La de caballo tiene mayor contenido de glucógeno, lo que la hace más dulce además en la cocción hace espuma. Es diferente. Por eso se usa para empanadas porque mezclada con grasa, más el agregado de la cebolla, no se nota".
En tanto, José Rizzo presidente de Carnes Matarifes y Abastecedores de Mendoza, tiene otra opinión al respecto. Negó que esta situación se dé, pero también lo encuadró como un hecho aislado. "Nosotros a través de la Cámara no sabemos absolutamente nada. No es tan así, existen muchos controles. Para hacer la faena de un caballo es complicado, no somos una provincia con grandes extensiones de campo, es muy difícil agarrar a uno", aseguró.
Rizzo también dio detalles de la carne de caballo con respecto a la vacuna. "La carne de caballo es marrón un poco más dulce y se puede camuflar para hacer empanadas, que mezclada con la grasa vacuna pasa pero que haya una faena de caballos o un grupo de gente que se dedique a esto difícil, no es que no haya pasado pero a través de la Cámara no tenemos conocimiento. Son hechos aislados", completó.
Fuente: Diario UNO Mendoza