El consumo de yerba mate, una bebida tradicional de Argentina, fue objeto de investigaciones que destacan sus beneficios para la salud. Según un estudio del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS) en colaboración con el Conicet y el Instituto Nacional de la Yerba Mate, el consumo diario de más de 550 mililitros de mate cebado podría estar relacionado con una menor incidencia de diabetes tipo 2 en un plazo de dos años.
Beneficios de la yerba mate para la salud y el metabolismo
Estudios vinculan a la yerba mate con efectos positivos sobre el control glucémico, la oxidación de grasas y el equilibrio antioxidante

Siguen los estudios que reafirman los beneficios de la yerba mate en la salud

Este hallazgo, basado en un análisis de 2.615 personas entre 35 y 74 años, refuerza la hipótesis de que ciertos compuestos presentes en la yerba mate, como los polifenoles antioxidantes, podrían influir positivamente en el metabolismo de la glucosa.
La yerba mate con raíces culturales en Argentina
La yerba mate, obtenida de las hojas del árbol Ilex paraguariensis, es una bebida con profundas raíces culturales en países como Argentina. Su consumo, que data de las prácticas de los pueblos indígenas guaraníes, se mantiene como un símbolo de identidad nacional y una tradición social.
El proceso de producción de la yerba mate incluye varias etapas que influyen en su sabor y propiedades químicas. Su elaboración comprende la cosecha de hojas frescas, el tostado a altas temperaturas para inactivar enzimas oxidativas, el secado para reducir la humedad al 4,5% y la maduración en cámaras de cemento o madera durante al menos 12 meses.
Este último paso incrementa la concentración de compuestos bioactivos como las metilxantinas y los polifenoles, responsables de sus propiedades antioxidantes y estimulantes.
Finalmente, el producto se tamiza y se mezcla en proporciones específicas de hojas y ramas antes de ser empaquetado.
Desde el punto de vista químico, la yerba mate contiene una amplia variedad de compuestos activos, entre ellos alcaloides como la cafeína y la teobromina, polifenoles como el ácido clorogénico, saponinas y minerales esenciales como potasio, calcio y magnesio.
Estos componentes fueron objeto de numerosos estudios preclínicos y clínicos que identificaron efectos beneficiosos, como la capacidad antioxidante, la reducción del colesterol, la mejora del metabolismo lipídico y la regulación de los niveles de glucosa en sangre.
Por ejemplo, una investigación del Instituto Nacional de Salud, de Estados Unidos (NIH) demostró que el consumo regular de yerba mate puede aumentar la actividad de enzimas antioxidantes en el plasma y reducir la peroxidación lipídica, lo que podría prevenir enfermedades cardiovasculares y metabólicas.
En el ámbito deportivo y de control de peso, la yerba mate también ganó popularidad debido a sus propiedades termogénicas, que aceleran el metabolismo y promueven la oxidación de grasas.
Además, su capacidad para prolongar la sensación de saciedad se destaca como un factor clave en la pérdida de peso.
El interés por la yerba mate creció en mercados internacionales
El interés por la yerba mate no se limita a Sudamérica. En los últimos años, su popularidad creció en mercados internacionales, impulsada por su inclusión en productos como bebidas energéticas y suplementos dietéticos.
Julia Sarreal, autora del libro Yerba Mate: The Drink That Shaped a Nation, contó a la Universidad de Arizona que la yerba mate evolucionó de ser un producto local a un símbolo cultural y comercial con impacto global.
Sarreal destaca que su investigación sobre la historia y producción de la yerba mate reveló cómo esta bebida moldeó la identidad y la economía de las regiones productoras.