A la hipertensión arterial se conoce como “la asesina silenciosa”. Es una enfermedad crónica que no suele presentar síntomas pero que sin embargo es un factor de riesgo en las enfermedades cerebrovasculares e isquémicas del corazón.
Día Mundial de la Hipertensión Arterial: ¿cómo prevenirla?

Por Valentina Fassi

El 17 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión Arterial, una jornada en la que se busca concientizar sobre el impacto de esta patología.
Según estimaciones mundiales de la OMS, la hipertensión arterial es responsable del 45 por ciento de los infartos y del 51 por ciento de los ataques cerebrovasculares.
¿Qué es la hipertensión arterial?
Es la elevación de los niveles de presión arterial de forma continua o sostenida. Para entenderlo mejor es importante definir la presión arterial. El corazón ejerce presión sobre las arterias para que estas conduzcan la sangre hacia los diferentes órganos del cuerpo humano. Esta acción es lo que se conoce como presión arterial.
El mejor tratamiento de la hipertensión es una buena prevención que evite su aparición. Para ello es fundamental seguir un estilo de vida cardiosaludable
¿Cuáles son sus causas?
Se desconoce el mecanismo de la hipertensión arterial más frecuente llamada “esencial", "primaria" o "idiopática" aunque existen factores que suelen estar presentes en la mayoría de las personas que la sufren. La herencia (padres o hermanos hipertensos), el sexo masculino, la edad, la obesidad, la ingesta de sal, el consumo excesivo de alcohol, el uso de algunos fármacos (incluso los de venta libre) y la poca actividad física o sedentarismo determinan la hipertensión.
¿Cómo se hace el diagnóstico?
La única manera de detectar la hipertensión es su medición. Muchas personas tienen la presión arterial elevada durante años sin saberlo. Existen dos medidas: la presión arterial sistólica (PAS) o máxima y la presión arterial diastólica (PAD) o mínima. Se considera presión arterial alta (hipertensión) cuando dicha medición máxima es mayor o igual a 140 y la mínima es de 90.
¿Cómo es el tratamiento?
La hipertensión, en la mayoría de los casos, no puede curarse pero sí puede controlarse. Para lograrlo debe seguirse un tratamiento regular de por vida para bajar la presión y mantenerla estable. La medicación es solo una parte de ese tratamiento. El médico también suele recomendar, si es necesario, una alimentación saludable para perder peso, no abusar del consumo de sal y alcohol y la importancia de realizar actividad física con regularidad.
¿Cómo prevenir hipertensión arterial?
Pero más allá del control del paciente hipertenso, también es necesario que la población sea consciente del riesgo al que está expuesta y qué hábitos de su estilo de vida suponen un factor determinante para sufrir hipertensión arterial y patologías asociadas. En este sentido, es necesario:
- No fumar y evitar el alcohol.
- Ejercicio físico. Al menos 30-60 minutos cinco días a la semana. La actividad recomendada variará en función de nuestra situación y estado, pero puede ir desde un simple paseo a buen ritmo a otras opciones más exigentes.
- Reducir el contenido de sal. Algo básico que parece no ser tan obvio para mucha gente que abusa de su consumo sin medida.
- Dieta hipocalórica. La base debe ser nuestra afamada dieta mediterránea. Productos frescos y de temporada sí. Productos ultrapocesados, no.
- Controlar el peso. Evitar la obesidad y el sobrepeso es un aspecto clave para no dar más alas a la hipertensión.
- Evitar situaciones de estrés y tener una buena higiene del sueño.
- Acudir a la consulta médica una vez al año si eres varón mayor de 40 años, mujer mayor de 50 años o si familiares de primer grado presentan hipertensión arterial u otros factores de riesgo asociado, como diabetes e insuficiencia renal.