La pobreza afectó al 52,9% de las personas en el primer semestre de 2024 en la Argentina. Además, el nivel de indigencia llegó al 18,1%, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en base al relevamiento de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Tras darse a conocer la preocupante cifra, Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica (UCA), explicó que esto “significa que un cuarto de la sociedad argentina de clase media, entre 2015 y 2024, cayó en una situación de empobrecimiento”.
Números que duelen: un cuarto de la clase media argentina cayó a la pobreza entre 2015 y 2024
Así reportaron desde el directorio del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica (UCA), tras conocerse los números de pobreza.
En el primer informe correspondiente al gobierno de Javier Milei el indicador dio un salto de más de 11 puntos con respecto al segundo semestre de 2023. Aquella vez en el cierre del gobierno de Alberto Fernández, la pobreza estaba en 41,7%, de las cuales el 11,9% quedaron en situación de indigencia. Se trata, además, de la peor cifra en 20 años.
Para el sociólogo Salvia, esta situación puede explicarse por diversas crisis que "se fueron acumulando" entre las que enumera: "las crisis de 2016, 2018, 2019. La situación de la pandemia en 2021 y después 2022, 2023". Además, también detalló: "Ha bajado la inflación, pere no hay reactivación. Los salarios están muy bajos, no se están creando buenos empleos, no hay inversión".
Salvia comenzó comparando los últimos datos con el inicio de las sucesivas crisis económicas que se dieron en los últimos años: “Si comparamos 2015 contra el primer semestre de 2024, si bien en aquel momento teníamos ya elevados niveles de pobreza que eran alarmantes, era 29% de pobreza y hoy tenemos 53%. Y teníamos 5% de indigentes. Hoy tenemos 18%”.
En este sentido, Salvia fue crítico de la situación actual y afirmó que casi un cuarto de la sociedad argentina de clase media "cayó en una situación de empobrecimiento", además de haber triplicado el índice de indigencia. "En clave del tiempo uno podría plantearse que bien que estabamos cuando estabamos mal”, sentenció.
Para el sociólogo, uno de los mayores problemas que dejaron las sucesivas crisis de los últimos 8 años es el deterioro en los ingresos de los trabajadores formales e informales. En este sentido, Salvia explicó que "esta situación viene acumulando capas de clases medias baja que tienen trabajo, se esfuerzan todos los días por tener mas trabajo a ver si logran compensar la perdida de ingresos que les genera la economía o el sistema económico y a pesar de eso son pobres".
Esto además, genera un efecto dominó sobre otros estratos de la sociedad, según detalló el director del Observatorio de la Deuda Social: "Una clase media, media baja y sectores populares que han restringido o caído fuertemente su consumo, tiene otro efecto sobre la marginalidad o la pobreza extrema: hay menos demanda de esas clases medias del trabajo informal que realizan los pobres, que no viven solamente de los programas. El remisero hace menos viajes, el servicio domestico trabaja menos horas, el jardinero tiene menos trabajos".
Para Salvia no hay dudas de que los jubilados son uno de los grandes afectados: "Dentro de los que han caído en la pobreza general son obviamente los jubilados".
Sobre los motivos del empeoramiento de los números en el primer semestre del 2024, Salvia detalló: "Hay dos mecanismos que operaron: uno fue la liberalización de los precios en un contexto de devaluación que hizo un estallido de los precios, sin que al mismo tiempo se ajustaran los ingresos. El segundo factor o mecanismo tiene que ver con que se hicieron mas precarios los trabajos. Hay una disminución de la cantidad de trabajo del sector informal, e incluso del sector formal, en donde ya no hay horas extras, no aumentaron los salarios de acuerdo al aumento de la inflación"
"Ha bajado la inflación, pero no hay reactivación. Los salarios están muy bajos, no se están creando buenos empleos, no hay inversión. Todo esto atenta contra la posibilidad de que esa clase media mejore su situación", concluyó el sociólogo.