Investigan el confuso hecho donde murió un hombre baleado con el arma reglamentaria de su pareja policía

Este lunes, cuando faltaban algunos minutos para llegar a las 13, falleció en la unidad de terapia intensiva del hospital Cullen, un empleado municipal llamado Diego Zambrella de 43 años, quien el sábado a la noche resultó herido con un balazo. El episodio se registró cuando, luego de una discusión, forcejeó por la cartera de su pareja policía, extrajo el arma reglamentaria de ella, se accionó el mecanismo de disparo y resultó baleado en el abdomen. Posteriormente fue trasladado y operado de urgencia en el hospital Cullen, y quedó internado en estado delicado.

Todo la confusa secuencia se registró dentro de la vivienda ubicada en calle Laprida al 3.300 del barrio Candioti Sur y ante la mirada de cincos menores de edad.

Como consecuencia de la deflagración del disparo de la pistola calibre 9 milímetros, los vecinos denunciaron el suceso a la central de emergencias 911. Minutos después llegaron oficiales y suboficiales de la Comisaría 3°, dialogaron con la mujer policía de 48 años con jerarquía de subinspector. Dijo que Zambrella era su pareja, que mantuvo una fuerte discusión verbal con él, que en la vivienda había un adolescente y chicos pequeños, que él intentó buscar las llaves de una camioneta en su cartera, pero sacó su arma reglamentaria y ante el peligro que significaba, se abalanzó para desarmarlo cuando se produjo un disparo que lo impactó en el abdomen.

Informaron la novedad sobre el acontecimiento ocurrido en el interior de la vivienda en barrio Candioti Sur a la Jefatura de la Unidad Regional I La Capital de la Policía de Santa Fe, y éstos hicieron lo propio con la fiscal de Homicidios en turno del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Ana Laura Gioria, que ordenó el secuestro de la pistola calibre 9 milímetros Hi Power para ser sometida a los peritajes.

Además, ordenó la realización de los peritajes criminalísticos dentro de la vivienda en la que ocurrieron los hechos, y ese trabajo fue realizado por los agentes del área Científica de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), ordenando también el secuestro de los dos teléfonos celulares de la pareja, de Zambrella y el de su mujer policía, como también el de una adolescente que habría filmado toda la situación.