En una mañana de lunes rutinaria pero repentinamente peligrosa, la tranquilidad de la calle Castelli al 2300 se vio interrumpida cuando una remisera se convirtió en el blanco de un intento de asalto. El reloj marcaba las 6.30 cuando la conductora accedió a transportar a dos individuos desde ese punto hasta la calle Regimiento 12 de Infantería al 2800, ubicada en el barrio Guadalupe Oeste.
Un intento de asalto a una remisera terminó con heridos y dos delincuentes detenidos
Sucedió este lunes a las 6.30 en avenida Galicia y Aristóbulo del Valle. Dos delincuentes intentaron asaltar a una remisera pero un policía y un transeúnte impidieron el robo
Por Juan Trento
Sin embargo, el viaje tomó un giro inesperado cuando, durante el trayecto, los pasajeros solicitaron un cambio de destino, desviándose hacia la altura 1800 de la misma calle. Alertada por la situación irregular, la remisera tomó una decisión audaz: detener el vehículo en la esquina de las avenidas Aristóbulo del Valle y Galicia.
Fue en este punto donde la tensión alcanzó su punto álgido. Gritando desesperadamente, la mujer denunció el intento de asalto, atrayendo la atención de un policía de civil que presenció la escena. Con celeridad y valentía, el agente actuó rápidamente, logrando la aprehensión de uno de los dos delincuentes.
Sin embargo, la confrontación no concluyó ahí. Un transeúnte, que se dirigía hacia un cajero automático en la zona, se vio envuelto en el caos cuando uno de los criminales, armado con un objeto punzante, lo atacó. En el enfrentamiento que siguió, el agresor resultó herido, al igual que su víctima.
Detenidos
La intervención del policía de civil resultó crucial asegurando la detención del segundo delincuente, gracias a la rápida respuesta de los agentes del Comando Radioeléctrico capitalino, que lo interceptaron varias cuadras más adelante, en la intersección de las avenidas Aristóbulo del Valle y Galicia.
La Jefatura de la Unidad Regional I La Capital de la Policía de Santa Fe informó de inmediato al fiscal de Flagrancia en turno del Ministerio Público de la Acusación, quien ordenó una serie de medidas urgentes. Entre estas, se incluyó la evaluación del estado de salud de los involucrados, la realización de peritajes forenses y la recolección de pruebas, tarea encomendada a los expertos del área Científica de la Policía de Investigaciones (PDI).
Además, se ordenó el secuestro de las imágenes captadas por las cámaras de videovigilancia públicas y privadas de la zona, en un esfuerzo por reconstruir los eventos y llevar a los responsables ante la justicia.