En Santa Fe, en los últimos días se registraron cinco ataques de yararás a perros callejeros en la zona de la costanera santafesina y otros en la costa de Alto Verde, lo que pone de manifiesto la proliferación de estos animales silvestres con mayor cercanía a la ciudad producto de las temperaturas y la crecida del río. Las imágenes de los perritos atendidos en distintos centros veterinarios hablan de las precauciones a tomar a la hora del cuidado de las mascotas en esta zona.
Cinco perritos sufrieron mordeduras de yararás en zona de costanera y Alto Verde

Desde el Instituto Municipal de Salud Animal (Imusa) recomendaron circular con precaución por la zona de costanera, además del dictado de cuestiones de cuidado al momento de pasear animales y menores que puedan ser víctimas de una mordedura.
Efecto de la crecida
Yanina Prieto, asistente ejecutiva de Biodiversidad diálogo con LT10 y se expresó sobre la proliferación de yararás en la costa santafesina: "Son animales que están siempre en este lugar y son parte de nuestra fauna. La ciudad de Santa Fe está inmersa en un humedal como paisaje típico de la zona".
"A esto se le suma la crecida que está restringiendo otros lugares donde estos animales podrían estar más cómodos, la realidad es que a las yararás no les gusta estar cerca de las personas, si se pueden alejar lo van a hacer, pero el agua hace que estén un poco más cerca. Los reptiles, animales de sangre fría, en las épocas calurosas como primavera y verano es cuando más activos están. Salen a comer y a reproducirse, por lo que están activos.", añadió Prieto.
Precauciones
En el dictado de cuestiones de cuidado, la especialista indicó: "En el caso de los animales de compañía que sacamos a pasear por la costanera llevarlos con correa y tratar de que no se vayan a lugares donde uno mismo no se metería, lo mismo con los chicos. Debemos tener un poco más de precaución".
Sobre el efecto del veneno de las yararás que habitan nuestra región, Prieto indicó que "tienen un veneno denominado "necrosante", que va comiendo el tejido alrededor de la herida a medida que va avanzando. No es un veneno que actúa al instante ni es fulminante como en el caso de las corales, que atacan el sistema nervioso".
"Tenemos bastante tiempo para que se pueda acercar a un centro de salud y ser atendido, entre 6 y 8 horas dependiendo del tamaño de la persona, cuando más grande más tiempo hay aunque hay que concurrir inmediatamente. Además, tratar de no aplicar ningún remedio casero porque eso puede empeorar la situación. Nada de torniquete, nada de chupar la herida. Lo único que se puede hacer hasta acercarse a un centro de salud es aplicar frío para evitar que el veneno se siga desparramando", agregó sobre las cosas a tener en cuenta en caso de picadura.