Los controles realizados por el Gobierno de Santa Fe sobre los usuarios inscriptos en la Tarifa Social de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) dejaron al descubierto consumos eléctricos desmedidos en la ciudad de Santa Fe y en San José del Rincón.
Detectaron fuertes abusos en la Tarifa Social en la ciudad de Santa Fe y Rincón con consumos de hasta 3500 kilovatios
Entre los casos relevados hay viviendas con facturas cercanas a los $800 mil, de las cuales los beneficiarios pagaron montos mínimos y el resto fue absorbido por el Estado
José Busiemi
En total, se detectaron 50 casos con consumos superiores a los 3.000 kilovatios, que obligaron al Estado provincial a cubrir 23.135.594 pesos en subsidios.
Según se informó oficialmente, los consumos relevados están muy por encima del promedio de un hogar santafesino, que se ubica entre 700 y 800 kilovatios. La situación derivó en la baja de usuarios del beneficio y en el refuerzo de los controles para evitar nuevos abusos.
Casos en la capital provincial
En la ciudad de Santa Fe se identificaron situaciones que reflejan con claridad el desvío del espíritu de la Tarifa Social. Uno de los casos ocurrió en una vivienda del barrio Residencial, sobre calle 1° de Mayo, donde se registró un consumo de 2.840 kilovatios, que generó una factura de 654.195 pesos. De ese total, 198.094 pesos fueron cubiertos por el Estado provincial.
Otro hecho se detectó en barrio Centenario, donde un usuario con Tarifa Social consumió 3.482 kilovatios. La factura ascendió a 779.439 pesos, pero el beneficiario abonó apenas 19.713, mientras que el resto del monto fue absorbido por el Estado.
Irregularidades en Rincón
En San José del Rincón también se constataron consumos elevados, que se sumaron al total de 50 casos detectados en la zona. Desde la Provincia señalaron que estas situaciones son objeto de auditorías específicas, ya que el nivel de consumo no se condice con los parámetros previstos para hogares que acceden a un beneficio destinado a sectores vulnerables.
Las autoridades provinciales remarcaron que los casos de Santa Fe y Rincón forman parte de un esquema más amplio de controles intensivos impulsado por la gestión del gobernador Maximiliano Pullaro, orientado a ordenar la administración de la EPE y garantizar un uso transparente de los recursos públicos.
Refuerzo de controles
La presidenta de la EPE, Anahí Rodríguez, advirtió que los números detectados muestran que “algunos usuarios están desvirtuando el espíritu de la Tarifa Social”, y confirmó que se avanzará con medidas más estrictas para evitar consumos excesivos. En ese sentido, recordó la adquisición de 75 mil telemedidores, que permitirán monitorear en tiempo real el consumo eléctrico y actuar de manera preventiva.
Desde el Gobierno provincial insistieron en que la Tarifa Social debe mantenerse como una herramienta de equidad, destinada a acompañar a los hogares que realmente lo necesitan. “El consumo desmedido de unos pocos impacta en el sistema y perjudica al conjunto de los usuarios”, señalaron, al tiempo que ratificaron la decisión de profundizar los controles en Santa Fe, Rincón y el resto de la provincia.















