La ciudad de Santa Fe se encamina a dejar atrás el tradicional símbolo de accesibilidad —la figura de una persona en silla de ruedas— para dar lugar a una representación más inclusiva y moderna. Así lo resolvió el Concejo Municipal este jueves, al aprobar una propuesta presentada por la presidenta del cuerpo legislativo, Adriana “Chuchi” Molina.
Santa Fe reemplazará el tradicional símbolo de accesibilidad por una "representación más inclusiva y moderna"
El Concejo Municipal aprobó una resolución que busca reemplazar el clásico ícono de la silla de ruedas por una figura más inclusiva, que represente la igualdad y la apertura para todas las personas.

Santa Fe adoptará un nuevo símbolo de accesibilidad en reemplazo a la figura de una persona en silla de ruedas
“La resolución que aprobamos hoy tiene un profundo valor simbólico y social”, afirmó Molina. Según explicó, el nuevo símbolo, impulsado por la Organización de las Naciones Unidas, muestra a una figura humana con los brazos abiertos, contenida dentro de un círculo. “Es una imagen que transmite inclusión, igualdad y apertura para todas y todos”, agregó la concejala.
El “Símbolo de la Accesibilidad” fue presentado por la ONU en 2015 como una invitación a repensar el concepto de discapacidad. La nueva figura busca dejar atrás el enfoque capacitista, que asocia exclusivamente la discapacidad con el uso de silla de ruedas, y propone una visión centrada en la accesibilidad universal.
Diseñado por la Unidad de Diseño Gráfico del Departamento de Información Pública de Naciones Unidas, el símbolo representa a una persona de forma estilizada con los brazos extendidos, rodeada por un círculo. Este diseño apunta a transmitir armonía, esperanza, inclusión y acceso igualitario en todos los ámbitos de la vida social.
“Este cambio refleja una mirada más moderna y respetuosa de las personas con discapacidad”, destacó Molina. También remarcó que la nueva imagen está en sintonía con la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, que tiene rango constitucional en Argentina.
La propuesta no busca solamente modificar una señalética, sino generar conciencia sobre la necesidad de construir una ciudad más accesible en todos los planos: educativo, cultural, informativo y cotidiano.