Su nombre no se encontraba en la lista de músicos programados para esa noche pero finalmente fue Jorge Cafrune quien la invitó a dejar su huella imborrable en Cosquín. Fue en 1965 cuando Mercedes Sosa se subió por primera vez al escenario del festival para forjar una historia que este año sumó un nuevo capítulo con el emotivo homenaje en la apertura del pasado sábado.
Google rinde homenaje a la Negra Sosa en todo el mundo
Por Romina Elizalde
La "Negra" interpretó Canción del derrumbe indio, de Fernando Figueredo Iramain, que integraría a su repertorio oficial en 1966, en pleno crecimiento del Movimiento del Nuevo Cancionero. Este jueves, al cumplirse 54 años de aquel suceso, Google decidió homenajearla en todo el mundo con su popular doodle que diseñó el artista Shanti Rittgers.
"Yo me voy a atrever, porque es un atrevimiento lo que voy a hacer ahora y voy a recibir un tirón de orejas de la comisión, pero qué le vamos a hacer. Siempre he sido galopeador contra el viento. Los voy a ofrecer el canto de una mujer purísima, que no ha tenido oportunidad de darlo. Aunque se arme bronca, voy a dejar con ustedes a una tucumana: Mercedes Sosa", dijo Cafrune ese día, según consta en el registro de la actuación del 31 de enero de 1965.
El inicio
La artista se consagró en ese escenario y pasó las fronteras: en 1967 realizó su primera gira por los Estados Unidos y Europa; al año siguiente grabó un nuevo disco y dos años después un tercero (El grito de la tierra) que incluyó Canción con todos, considerado como un himno latinoamericano.
En 1969 se presentó por primera vez en Chile y grabó un disco en homenaje a los cantautores Violeta Parra y Victor Jara. Posteriormente lanzó otro para celebrar el arte de Parra, en coincidencia con el gobierno de Salvador Allende.
De familia peronista, en su juventud apoyó las causas sociales, en los 60 se afilió al Partido Comunista y fue militante de izquierda toda su vida. El Golpe de Estado de 1976 la incluyó en la lista negra y sus discos fueron prohibidos.
Pese a eso, en 1982, poco antes de la Guerra de Malvinas regresó a Argentina y ofreció una serie de conciertos en el Teatro Ópera donde junto a exponentes del pop, tango y rock se manifestó contra la dictadura logrando un evento cultural sin precedentes.
En 1997 subió a Charly García al mítico escenario de Cosquín en un show histórico donde interpretaron incomparables versiones de "Rezo por vos" y del "Himno Nacional Argentino", generando un sinfín de criticas. Cansada de las polémicas no volvió a pisar ese escenario.
En 1999 grabó La Misa Criolla de Ariel Ramírez y pese a ser agnóstica lo hizo de manera excepcional y se la dedicó a su madre. Ese mismo año cantó en el Estadio de Boca Juniors con Luciano Pavarotti.
En 2003 fue convocada por Martha Argerich para que la acompañara en el Teatro Colón. En 2008 grabó Cantora, su último trabajo de disco doble con 34 canciones, grabada junto a destacados cantantes iberoamericanos.
Fue reconocida y premiada: recibió el Premio Gardel al "Mejor disco del año" y se quedó con cuatro de los seis Grammy Latino a los que fue nominada. En 2008 fue nombrada Embajadora de Buena Voluntad de la UNESCO. Con el nuevo siglo volcó su lucha a la defensa del Medioambiente y proclamó el respeto a la Pachamana.
Dejó más de 130 álbumes (propios en estudio y en vivo, recopilatorios y en colaboración) con su voz. Fue convocada por artistas internacionales como Sting, Luciano Pavarotti, Andrea Bocelli y Joan Manuel Serrat, entre otros. Además cantó con la nueva ola del folclore argentino: Liliana Herrero, Soledad Pastorutti, Abel Pintos y otros tantos que quisieron cantar a su lado.
Sosa murió a los 74 años el 4 de octubre de 2009 a las 5 de la madrugada una falla cardíaca seguida por una insuficiencia renal. Desde hacía más de 30 años padecía el mal de chagas, y semanas antes, el 18 de septiembre, había sido internada en un sanatorio de Palermo donde pasó su ultima semana en una lucha silenciosa.
Infobae/LaVoz