Los asesinatos de Andrés “Pillín” Bracamonte, líder de la barrabrava de Rosario, y su ladero Raúl “Rana” Attardo son investigados por un equipo conformado especialmente con el objetivo de dar con los autores materiales e intelectuales del doble crimen que conmovió a Rosario el sábado a la noche. Así lo señaló este lunes, el fiscal regional de Rosario, Matías Merlo, durante una conferencia de prensa realizada en el Centro de Justicia Penal, en la que estuvieron presentes además el ministro de Justicia y Seguridad de Santa Fe Pablo Cococcioni, la secretaria de Seguridad de la Nación Alejandra Monteoliva y el fiscal que encabeza la investigación Alejandro Ferlazzo.
El asesinato del jefe de la barra de Rosario Central "excede al manejo de la barrabrava y se extiende a otros delitos"
El fiscal Alejandro Ferlazzo, parte del equipo especial conformado para investigar el asesinato del jefe de la barra de Central y su ladero Raúl "Rana" Attardo, habló con los medios
En ese marco, Ferlazzo remarcó que la situación de Andrés Pillín Bracamonte "excede la cuestión del manejo de la hinchada de Rosario Central y se extiende a otros posibles negocios ilícitos. Por eso las hipótesis de trabajo son múltiples para establecer desde dónde pudo venir este ataque”.
Cuando la ciudad superaba las primeras horas de conmoción por el doble asesinato registrado a pocas cuadras del Gigante de Arroyitos, los funcionarios judiciales y políticos salieron a brindar las primeras declaraciones públicas sobre lo ocurrido.
El primero en tomar la palabra en el contacto con la prensa fue el titular de Fiscalía Regional de Rosario, Matías Merlo. El funcionario judicial remarcó: "Se conformó un equipo integrado por fiscales Ferlazzo, Georgina Parola y Luis Schiappa Pietra a los fines de llevar adelante las medidas investigativas por los homicidios de Pillín Bracamonte y su ladero Attardo, pero teniendo en cuenta que esta situación viene relacionada con otras investigaciones que nosotros vamos a agrupar en este equipo de trabajo”.
En ese sentido, Merlo mencionó “fue la tentativa de homicidio que se dio después del clásico entre Central y Newell’s en agosto pasado (en el que Bracamonte salvó la vida por muy poco) como también la balacera que sufrió en su domicilio y otros atentados del año anterior a la entrada a la escuela de uno de los hijos de Bracamonte”.
“Estas circunstancias nos dan diferentes hipótesis de conflictos y sobre ellas queremos ser mesurados, ir trabajando para dar una respuesta lo más rápido posible. Sobre los sicarios estamos en los primeros pasos de la investigación. Hay muchas medidas que dispuso el fiscal Ferlazzo junto con el equipo de trabajo a los fines de poder determinar quienes fueron los autores y cuáles fueron los motivos para cometer este hecho”, subrayó Merlo.
Por su parte, Ferlazzo ratificó que por el momento “no hay detenidos” por esta causa. “El hecho sucedió a la salida del partido en el estadio de Rosario Central. A las 21.43 aproximadamente. Bracamonte iba circulando en una camioneta acompañado por Attardo. Fueron atacados por al menos tres personas. Les efectuaron múltiples disparos. Fueron más once disparos. Cada uno de los cuerpos recibió cinco impactos de bala y por ese motivo fallecieron”, precisó.
Ferlazzo agregó que “se llevaron adelante las medidas de recopilación de información, cámaras de seguridad. La hipótesis es que a partir de múltiples conflictos. Esto ha surgido de distintas medidas judiciales. La situación de Andrés Bracamonte excede la cuestión del manejo de la hinchada de Rosario Central. Se extiende a otros posibles negocios ilícitos. Las hipótesis de trabajo son múltiples para saber desde donde pudo venir este ataque. Lo que sabemos en concreto es que (Bracamonte) sufrió dos intentos de matar muy recientes, además de los múltiples ataques que el mismo Bracamonte lo reconoció a lo largo de su vida”.
Alumbrado público, cámaras y testigos
Una cuestión sobre la que fue consultado Ferlazzo tenía que ver con el alumbrado público, ya que al momento de producirse el crimen el servicio estaba interrumpido. “Sabemos que en dos cuadras no había luz. Ese día, el alumbrado público de activó cerca de las 20, como siempre. Y el día anterior la cuadra tuvo luz. El sábado a la noche, la luz volvió cerca de las 0.50. Estamos trabajando en ese punto. Hemos pedido informes para saber cuál fue el desperfecto. Pudo ser un problema normal, y que haya sido aprovechado por los autores para llevar adelante el ataque en ese lugar. Tampoco descartamos cualquier otra hipótesis”.
Con relación a las cámaras de video vigilancia del lugar, el fiscal sostuvo que "funcionaban" en el momento en que ocurrió el ataque. "Estamos recopilando todas las cámaras. Este es un proceso muy arduo y se está realizando. Lo que se estableció es que Rosario Central no tiene ningún fílmico ni externo ni interno del club”, agregó.
“Hubo muchísimos testigos presenciales. El crimen sucedió en una zona muy poblada, con mucha gente a la salida de la cancha. Pedimos la colaboración de quienes pudieran ver algo. Se han difundido algunos audios, que mucha gente vio algo. Les pedimos que se presenten para colaborar para precisar cuestiones propias de la mecánica del hecho. Se garantizará la extrema reserva y seguridad para que nadie se sienta atemorizado”.
“El ataque fue perpetrado por personas que se acercaron caminando. De qué forma se retiraron, no lo tenemos claro debido al cúmulo de personas que había en el lugar. Por el momento tenemos que habrían sido tres los agresores, pero el material balístico hallado corresponde a una misma arma. Creemos como hipótesis que hubo más tiradores ", agregó.