Aquellas personas con alto coeficiente intelectual, comúnmente llamados superdotados, piensan y ven el mundo de una forma distinta, mientras tratan de encajar en un sistema educativo y en una sociedad que muchas veces no los comprende. Mensa, una organización internacional sin fines de lucro creada con la intención de identificar a este tipo de gente, es el espacio donde pueden conocer a otros con los mismos intereses y habilidades que ellos.
Cómo piensan los superdotados: su estilo de vida y su relación con el sistema educativo
Por Mario Córdoba

Cómo piensan los superdotados y por qué es importante la detección temprana
Se estima que solo 2% de la población mundial tiene alto coeficiente intelectual. En Mensa Argentina hay alrededor de 400 miembros y unos 40 pertenecen a la provincia de Santa Fe. Dos integrantes de la misma, en diálogo con UNO Santa Fe, dieron a conocer cómo es su estilo de vida y resaltaron la importancia de que haya una normativa y un sistema educativo que contemple a los niños superdotados.
Sol Romero tiene 42 años, vive en Rafaela y trabaja en una multinacional de Sunchales. Estudió enfermería, tecnicatura en investigación de la escena del crimen y ahora está cursando la licenciatura en criminología y seguridad y una diplomatura en investigación internacional. "Desde chiquita, antes de empezar la escuela, tenía ganas de ir ahí porque tenía a mis hermanos más grandes que iban. Mi papá me compraba cuentos, revistas de ingenio y no recuerdo que ningún otro chico quisiera eso. Las maestras en la primaria siempre me decían que era buena alumna, me daba cuenta de eso, pero no que quizás los otros compañeros tenían que quedarse horas estudiando para sacarse una buena nota, mientras que con ir a clases o ver el material un día ya aprobaba", dio a conocer la mujer.
"Uno se considera que a lo mejor puede llegar a tener alguna diferencia de alta capacidad, pero nunca pensás que podés llegar a entrar en ese 2%", manifestó la enfermera. Desde la asociación no les dan a conocer cuál es su número de coeficiente intelectual, hace años no lo dan a conocer para así evitar debates o competencia entre los miembros.
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Por otro lado, resaltó la importancia de poder saber que es superdotada: "Cuando me dieron el resultado y me dijeron que estaba adentro es como que pasé a entenderme, me pude justificar. Si buscaba algo o me interesa en determinada cuestión pensaba que tenía algún problema y ahora sé que tengo inquietudes distintas, porque estamos cableados de otra forma, porque nuestra manera de relacionarnos la hacemos de forma diferente, ni mejor ni peor. Fue un alivio y creo que para muchos también, encontramos un lugar de pertenencia. Antes de entrar a Mensa me consideraba una persona introvertida, y cuando llegué me empecé a relacionar de una manera distinta, descubrí que no era introvertida, sino que me había guardado cosas porque no tenía con quien compartirlas".
Otro de los integrantes de Mensa Argentina es Willie Verger, tiene 75 años, es ingeniero y se desempeñó como docente en la Facultad de Ingeniería de una UNR y en la UTN. Hace 20 años está en la organización y al igual que Sol, considera que es un espacio que le permitió conocer gente con pensamientos y gustos similares: "A mí siempre me gustaron los juegos de ingenio, acá encontré con mucha facilidad personas que se acoplaron, formamos un grupo, nos proponíamos resolver los desafíos. No sé si en otro lado hubiese encontrado esto. Mucho de esos juegos los hicimos y los incluí en un libro que escribí. Junto con un miembro de Inglaterra terminamos publicando un artículo en una revista de matemáticas del Reino Unido. Es como que no existen limitaciones de lo que podés hacer. Y acá en Rosario terminamos siendo un grupo de amigos, nos llevamos muy bien, nos reunimos todos los martes hace 20 años".
Las dificultades que a algunos superdotados se les presentan son tal vez a la hora de socializar o de encontrar un grupo de pertenencia, ya que pueden hacer amigos, pero no significa que tengan los mismos intereses. "Algunos chicos no se sentían a gusto en la escuela, tenían algunas dificultades para interactuar", dio a conocer el rosarino. Y agregó: "La inteligencia puede ser genética porque la persona puede tener genes que lo hace más inteligente. Pero hay otros que por ahí no tienen esos genes, pero en base a la perseverancia, al estudio, a la actividad que tienen, logran tener capacidades similares a los primeros".
Mensa cuenta con distintos grupos según los intereses y habilidades de sus miembros, ya sea que les gusten los juegos de mesa, la música o las películas. "Me parece muy importante para los más chicos para que puedan empezar a encontrar un lugar distinto y no frustrarse desde pequeños", relató Sol. Actualmente la agrupación no acepta integrantes menores de 16 años, aunque existen otros espacios que sí. Además, hay un grupo formado por miembros de Mensa que apunta a atender a chicos que tienen alta capacidades intelectuales y que a veces no se sienten comprendidos o cómodos en un ambiente común.
En la provincia de Buenos Aires se impulsa la ley Benjamín, la cual propone que haya una detección temprana y un acompañamiento institucional para las personas con altas capacidades. Mientras que, en Jujuy y Chaco sí hay legislaciones específicas que contemplan un programa especial para poder acompañar a niños con esta condición. Al respecto, Romero señaló: "Se está trabajando en el resto de las provincias para que en la escolaridad de los más chicos pueda llegar a considerarse, no solamente en las diferencias, sino también el autismo. Es una forma de pensar distinto que no está contemplada y que a veces hace difícil la relación con los demás y el aprendizaje".
Cómo saber si se es superdotado
En la web de Mensa Argentina (http://www.mensa.org.ar/) hay una serie de test para comprobar si la persona es o no superdotada. Además, se puede encontrar toda la información necesaria para entender y reconocer a la gente con alto coeficiente intelectual.
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