La impunidad de los delincuentes en la ciudad pareciera no tener ni techo ni límites; esto, sumado a la falta de respuesta por parte de los organismos de seguridad, hace un cóctel terriblemente peligroso para los vecinos de prácticamente todos los barrios de Santa Fe que viven a merced del accionar delictivo.
Se topó con el ladrón en su casa: "Tranquilo loco, no llames a la cana, ya me voy"
Los casos de inseguridad se repiten todo el tiempo y de diversas formas, pero que un santafesino llegue a su casa luego de un momento de distensión, se encuentre cara a cara con un delincuente con todo lo robado preparado en cajas para irse y que para colmo trate de "tranquilizar" al dueño del hogar para que no llame a la policía y no haga "bardo", ya es demasiado.
Esto le pasó a Hernán, vecino de barrio Ciudadela, que vive sobre pasaje Paraguay al 5.200, cuando el domingo por la mañana cuando llegaba de una fiesta con su pareja y se disponía a ingresar su auto, se encontró con la desagradable situación.
"La mayor impotencia es llegar a tu propia casa y que el delincuente esté adentro y uno afuera sin poder hacer nada. Yo le hablaba desde la vereda tratando de abrir el portón y el ladrón adentro. Lo único que faltaba era que me invite a tomar algo a mi propio hogar", recordó Hernán.
"Llegamos de una fiesta con mi señora y cuando bajo del auto para abrir el portón veo una persona del lado de adentro. Pensé que era uno de los hijos de mi pareja y automáticamente le dirijo la palabra; pero al instante me doy cuenta que era un delincuente que estaba acomodando todas las cosas que había encontrado para llevárselas. Evidentemente estaba esperando a alguien más que lo busque porque había preparado tres cajas de herramientas grandes y pesadas", continuó agregando el vecino de barrio Ciudadela.
En la desesperación del momento, Hernán dudó entre abrir la reja, llamar a la policía o disuadir al delincuente pensando que el mismo podía haber estado armado. "Todo pasó muy rápido mientras el mismo ladrón me decía que me quede tranquilo que ya se iba. En un momento cuando logro abrir el portón, el delincuente se fue caminando para el fondo de mi casa, hacia el patio y trepó una pared por la que había ingresado", subrayó y agregó: "Tengo cámaras por toda la casa y este ladrón pasa caminando por delante de ellas sin ningún tipo de pudor; eso es lo que me provoca mucha bronca de la mano de una terrible sensación de impunidad".
En lo que va del año 2018 a este vecino ya le ingresaron a robar en su vivienda 7 veces, y con cada robo refuerza un poco más la "seguridad" de su hogar, aunque todo intento parece en vano.
"En una de esas oportunidades que me robaron me fui al Ministerio de Seguridad y allí me dijeron, palabras más, palabras menos, que es responsabilidad de la Policía; fui al Ministerio Público de la Acusación y me argumentaron que tienen las manos atadas desde el Ministerio de Seguridad y que la Policía no actúa; y en la misma Policía me dijeron que no tienen las herramientas necesarias y que necesitan la luz verde de los fiscales; en fin, en lugar de asumir responsabilidades lo más fácil es arrojarle la culpa al otro, y en el medio estamos los vecinos seguimos presos de los delincuentes", sostuvo Hernán, repleto de impotencia, bronca y malestar por la situación que está atravesando.
Finalmente, reconoció: "El jefe de la comisaría 9ª se hizo presente en mi casa y se mostró preocupado luego de tantos robos sufridos. Debo resaltar que se comprometió con mi situación, pero me siguieron robando y da la impresión que no alcanza sólo con la preocupación de la Policía".