La Convención Constituyente de Santa Fe cerró el debate marcado por contrastes y posturas firmes de los jefes de bloque. Cada uno dejó claras sus prioridades y evaluaciones sobre el texto que será la nueva Constitución provincial, reflejando tanto el consenso mayoritario como las críticas de las minorías.
Entre consensos, rechazos y desafíos pendientes: los discursos de los jefes de bloque que cerraron la Convención Constituyente
Lewandowski, Granata, Mayoraz, Pirola y Bastía dejaron sus posturas finales sobre la nueva Constitución de Santa Fe. Algunos destacaron avances históricos y ampliación de derechos, otros cuestionaron la legitimidad del proceso y criticaron el alcance de la reforma.

Entre consensos, desafíos pendientes y rechazos: los discursos de los jefes de bloque que cerraron la Convención Constituyente

Entre consensos, desafíos pendientes y rechazos: los discursos de los jefes de bloque que cerraron la Convención Constituyente
Marcelo Lewandowski, del bloque Activemos, sostuvo que su espacio trabajó con “la mayor de las responsabilidades y con honestidad intelectual”, y destacó que se incorporaron propuestas de distintos sectores de la provincia, como la participación en Rosario, Reconquista y la transmisión en vivo de las comisiones, para garantizar la participación ciudadana.
Enfatizó la importancia de los nuevos derechos incluidos en la Constitución, como la limitación de mandatos, la profesionalización de las fuerzas de seguridad, el fortalecimiento de la banca pública, y el reconocimiento de la ciencia, tecnología y la innovación.
Artículo por artículo: este es el texto de la nueva Constitución de Santa Fe
Lewandowski destacó también la inclusión de derechos a la niñez, ancianidad, consumidores y personas con discapacidad. Sin embargo, reconoció los límites del proceso, especialmente en materia judicial: “Nosotros no aprobamos prácticamente nada; entendemos que el Poder Ejecutivo avanza sobre la justicia y eso no nos gusta”.
Por su parte, Amalia Granata, del bloque Somos Vida, ofreció un enfático rechazo al proceso y a la reforma: “Se termina esta farsa que ya estaba escrita… lamentablemente no respetaron a las diferentes voces de la sociedad”. Criticó la desconexión entre la política y la gente: “Muchos no saben ni lo que es una Constitución… se aseguraron privilegios mientras la sociedad enfrenta problemas de agua, gas, cloacas, seguridad y pobreza”.
Granata cuestionó también la independencia del Poder Judicial y denunció que la nueva constitución favorece al Ejecutivo: “Cuando la justicia deja de ser independiente, abunda la impunidad, la corrupción y la desconfianza en un pueblo”. Además, advirtió sobre posibles aumentos de impuestos y empleados públicos derivados de la autonomía municipal, y reclamó mayor atención a jubilados, discapacitados, médicos y docentes.
Desde La Libertad Avanza, Nicolás Mayoraz se sumó a las críticas y aseguró que representaba a santafesinos que buscan un verdadero cambio. Cuestionó la legitimidad del proceso y sostuvo que la Convención estuvo marcada por intereses políticos individuales: “Un acuerdo político puso por delante los intereses personales por encima de los intereses de la gente… lo primero que se aprobó favoreció a los que gobiernan”.
Criticó la inclusión de ciertos derechos considerados simbólicos y cuestionó la falta de soluciones concretas en áreas como el agua, la educación y la autonomía municipal: “El Estado no crea derechos, los garantiza; y los problemas estructurales no se solucionan solo plasmando derechos en la Constitución”. También cuestionó la independencia judicial y advirtió que sin ella Santa Fe corre riesgo de autoritarismo y arbitrariedad.
En contraste, Rubén Pirola, de Más para Santa Fe, adoptó un tono más equilibrado y destacó que su bloque buscó enriquecer la Constitución y defender derechos históricos. Subrayó la diversidad de su espacio y la voluntad de diálogo: “El debate no nos paralizó, sino que nos desafió a que muchas de nuestras ideas sean parte de esta Constitución”.
Pirola valoró la incorporación de derechos en áreas como salud, educación, cultura, cooperativas y sistema productivo, así como mecanismos de participación ciudadana y equilibrio de poderes: “No estamos conformes con la Constitución ideal, pero sí con la que pudimos alumbrar del debate y la discusión de 69 convencionales”.
Por último, Fabián Bastía, de Unidos, remarcó que la nueva Constitución es “un hito histórico y un legado para futuras generaciones”. Destacó la importancia del diálogo y el consenso, resaltando que la virtud del proceso permitió superar conflictos y fortalecer la institucionalidad: “Se fortalece la institucionalidad… la virtud de la templanza se impuso sobre la ira, el grito y la agresión”.
Bastía enumeró avances concretos en la nueva arquitectura del poder, como la eliminación de reelecciones indefinidas, límites de edad para cargos judiciales, la seguridad como derecho ciudadano y la creación de organismos independientes como el Ministerio Público, el Tribunal de Cuentas y la Defensoría. También resaltó que la reforma llegó en un momento histórico oportuno, a pesar de la complejidad y adversidades: “El tiempo es ahora… este es un paso más en el trabajo institucional de Santa Fe”.
El cierre de la Convención dejó en evidencia la pluralidad de miradas sobre la nueva Constitución. Mientras la mayoría destacó avances históricos, ampliación de derechos y fortalecimiento institucional, las voces críticas cuestionaron la legitimidad del proceso, advirtiendo posibles riesgos de aumento de cargas fiscales y concentración de poder.
La nueva Constitución de Santa Fe, ahora lista para su sanción formal, refleja tanto la historia y los valores de la provincia como los desafíos pendientes que la política deberá abordar para garantizar que los derechos plasmados en el papel se traduzcan en resultados concretos para la ciudadanía.