El diputado nacional de la Unión Cívica Radical y ex rector de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), Mario Barletta, se refirió al debate por el financiamiento universitario que atravesó esta semana la Cámara de Diputados, donde se logró rechazar el veto presidencial a la ley que garantiza recursos para las universidades.
La universidad pública, entre "la gratuidad irrenunciable" y un debate que se abre sobre el rol social de los egresados
El diputado radical santafesino Mario Barletta defendió la gratuidad universitaria, pero remarcó la necesidad de debatir una contraprestación social de los profesionales formados en instituciones públicas, financiadas con los impuestos de quienes no pudieron acceder a ellas

“No sorprendió la votación porque la situación de las universidades se volvió insostenible, con salarios docentes y no docentes deteriorados y presupuestos que no alcanzan”, explicó Barletta, quien remarcó que la falta de respuestas del Poder Ejecutivo obligó a insistir en el tratamiento del proyecto.
Críticas a la falta de consensos
Barletta, en diálogo con el programa Mañana UNO por UNO 106.3, señaló que la crisis actual es consecuencia de la falta de diálogo y consensos. “Los malos tratos y la ausencia de un presupuesto en los últimos dos años llevaron a que estemos discutiendo permanentemente reclamos que deberían resolverse de manera planificada”, apuntó.
El legislador también relativizó las lecturas políticas sobre el resultado de la votación: “No hay una correlación automática entre lo electoral y la composición de fuerzas en el Congreso. Lo que hay es un deterioro de la situación que generó la necesidad de actuar”.
Gratuidad universitaria y compromiso social
Barletta defendió la gratuidad de la universidad pública como principio fundamental: “Estoy a favor de la gratuidad porque quiero que todos tengan la oportunidad de ir a la universidad”. Sin embargo, advirtió que también es necesario debatir el rol social de los egresados: “Los que nos recibimos en la universidad pública debemos devolver de alguna manera lo que nos dio el Estado, porque eso fue posible gracias a los impuestos de quienes nunca pudieron acceder a la universidad”.
Un plan educativo pendiente
Más allá del presupuesto, Barletta reclamó discutir los problemas estructurales del sistema educativo argentino. “Si un chico no tiene seguridad alimentaria y no desarrolla su sistema neuronal en la infancia, no tiene posibilidades reales de terminar la escuela primaria o secundaria. Y de esto casi nadie se ocupa”, alertó.
El ex rector de la UNL cuestionó la falta de políticas a largo plazo y propuso que las propias universidades tomen la iniciativa: “Voy a golpear las puertas de los rectores para que impulsen un plan nacional educativo, porque si seguimos con esta tragedia educativa, no tenemos un país para el futuro”.
Para Barletta, las desigualdades en la inversión entre provincias, sumadas a la ausencia de coordinación nacional, explican gran parte de los problemas actuales: “Lo que se invierte por alumno en una provincia puede ser hasta diez veces más que en otra. Esa injusticia educativa nos está hipotecando como país”.