La bajada de lanchas del Club Náutico de Caza y Pesca de Santo Tomé sobre el río Salado se volvió a quedar sin agua por tercer año consecutivo. Se trata de la caleta que el club utiliza para bajar a aguas del río Salado las más de 200 embarcaciones que los socios tienen en el lugar.
Por tercer año consecutivo, la bajada del Club Náutico Santo Tomé se quedó sin agua
A pesar de ello, la entidad garantiza el servicio trasladando las lanchas directamente hacia el río grande. Este viernes, el Salado dejó una marca en Santo Tomé de 0,76 metros; casi tres metros menos de lo que tenía dos meses atrás. El 18 de noviembre midió 3,65 metros.
La falta de lluvias y la bajante del Paraná condicionan directamente el actual escenario del Salado y los pronósticos no son alentadores. Desde el Club solicitan extremar los cuidados en la navegación y piden realizar una pesca responsable.
Carlos Naput, titular de la entidad, explicó: "Hace una semana tuvimos que clausurarla. No tenemos calado. Desde donde está la caleta al río grande tenemos aproximadamente 250 metros de un canal artificial. Es el tercer año consecutivo que a esta altura del año".
Precisó que, por el descenso de las aguas, se profundizó en varias oportunidades el canal. "Ahora está vacío y tiene más de tres metros y medio", apuntó.
"Cuando en octubre comenzó a llenarse estábamos contentos, llegó a 3,60 metros no hace mucho. Pensamos que, en el caso que baje, podría llegar a los dos metros... pero hoy estamos en 0,60 metros", manifestó. Según contó, con una altura de 1,50 metros, la bajada puede funcionar.
Al no estar operable la bajada tradicional, Naput informó que en "enero se compró un tractor y se realizó una calle interna que va hasta el río grande. Allí se hizo una bajada directamente al río Coronda. El club tiene más de 200 embarcaciones en guardería y tenemos un tractorista por la mañana y otro por la tarde".
Advirtió que, con este escenario de bajante, el club brinda servicio desde las 6 de la mañana y hasta las 20:30. "De noche, sobre la costa del río no hay luz, se complica y es un poco riesgoso. Le pedimos a los asociados que tengan esa preocupación de volver antes de que caiga el sol", detalló en declaraciones al programa "DE 10" que se emite por "LT 10"
Hizo referencia a los peces muertos por falta de oxigenación del agua y aclaró que es una situación que no se da sobre el cauce principal del río. "El problema son los arroyos que ingresan del Salado hacia las islas y que nuevamente se han quedado sin calado y hay pozos. Esos pozos se empiezan a calentar y empieza a haber mortandad de peces", precisó.
Advirtió sobre los peligros de navegar con esta altura del río, por la presencia de troncos y de bancos de arena: "Uno cree conocer el río, pero los cambios son impresionantes en apenas días. Baja de a 10 o 12 centímetros por día"
Comentó que por estos días hay mucho pique en la zona y les pidió responsabilidad a los pescadores: "Hay muy buena pesca porque se ha encajonado todo el pescado sobre el río grande. Hay que ser muy cuidadoso con las especies y tamaños. Hay que cuidar, porque sino a futuro no vamos a tener una buena pesca. A los pescadores, recomendarles capturas de especies que no estén vedadas."