El mercado de pases está llegando a su fin, y en Unión dejará profundas consecuencias. Es que quedó expuesta la profunda diferencia entre el entrenador Cristian González y el presidente Luis Spahn, quien es el encargado de encabezar y cerrar las gestiones tendientes a la conformación del plantel.
En Unión, ¿se puede pensar en Kily González para el 2025?
La división quedó expuesta entre Cristian González y Luis Spahn por un paupérrimo mercado de pases. ¿Serán los últimos partidos del DT en Unión?
El "vamos por el oro" que no se cumplió en Unión
Si se toman como referencia los dos últimos años, Unión se caracterizó por ventas millonarias, como fueron las de Juan Carlos Portillo a Talleres, Juan Ignacio Nardoni a Racing, Lucas Esquivel a Athletico Paranaense de Brasil, Imanol Machuca a Fortaleza de Brasil, Kevin Zenón a Boca, Mauro Luna Diale al Ajmat de Rusia y Federico Vera a Independiente.
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En tanto que las llegadas no fueron acorde a todo lo que vendió Unión. Es una realidad que todavía no se terminó de cobrar todo ese dinero, mientras que también resta otro tanto del juicio que se le ganó a la empresa aseguradora Galeno por los pases de Bruno y Mauro Pittón a San Lorenzo, en junio de 2019.
Mientras que llegaron algunos de peso como Nicolás Orsini, Franco Pardo (cuando llegó no tenía la relevancia actual), Gonzalo Morales, Miguel Torrén, Adrián Balboa, Lucas Gamba y también se dio el regreso de los hermanos Bruno y Mauro Pittón.
"Vamos por el oro", manifestó Luis Spahn en diálogo con LT9 (AM 1150) antes de que arranque el mercado de pases, en lo que se entendió como que se invertiría en el proyecto deportivo para dar el salto de calidad e ir por los objetivos superadores, como pelear el campeonato e ir por la clasificación a los torneos internacionales del 2025, con la Libertadores como gran anhelo.
El equipo de Cristian González respondió y lo sigue haciendo con su protagonismo en lo más alto del Torneo de la Liga Profesional, más allá de haber quedado relegado tras la derrota dura ante Tigre y el pobre empate ante el humilde Deportivo Riestra.
Pero desde que comenzó el torneo Cristian González fue tirando con munición gruesa contra la CD que comanda Luis Spahn, enojado por la inhibición en FIFA por la deuda con Gustavo Munúa, por no haber complacido sus deseos de contar con Franco Fragapane, entre otros, y por lo que entendió, según sus palabras tras el partido ante Riestra, del "mensaje" que los dirigentes enviaron a los medios donde se dio a entender que Kily le bajaba el pulgar a los nombres de jerarquía que le arrimaban los directivos.
Kily González mira la puerta de salida en Unión
"Yo ya sé lo que tengo que hacer", manifestó Cristian González tras la derrota ante Racing, en lo que fue su punto de mayor ebullición. Al otro día, en Casasol, se hizo presente el presidente Luis Spahn para hablar con el DT y su cuerpo técnico, como el mismo Kily lo confirmó.
En tanto que el capitán Claudio Corvalán reconoció en diálogo con TNT Sports, en la previa del partido ante Rosario Central, que tuvieron que convencer a Kily para que no dé un paso al costado, como había amenazado tras la derrota ante Racing en Avellaneda.
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Luego, el entrenador manifestó que se debía a "sus chicos" y que se iba a quedar en Unión, incluso ante los rumores que lo vincularon a un retorno a Rosario Central tras la partida de Miguel Ángel Russo y de que era el Plan A de Juan Román Riquelme por si se decidía terminar con el ciclo de Diego Martínez.
A Kily González le queda contrato hasta el 31 de diciembre, donde si no ocurre una catástrofe futbolística seguramente lo respetará. Pero lo concreto es que es un hecho que no habrá continuidad para el 2025, como consecuencia de las secuelas, generadas por las profundas diferencias generadas en este mercado de pases con los dirigentes, que siguen en silencio.