Colón atraviesa su momento más crítico de los último 30 años, comparado con aquellos años en los que José Vignatti se hizo cargo de la institución.
Colón sufre el momento más crítico de las últimas tres décadas
El fracaso de Colón se llevó puesto a todos y atraviesa el momento más delicado de las últimas tres décadas
Colón atraviesa el peor momento de las últimas tres décadas
En aquel entonces el equipo jugaba en la B Nacional y el Ascenso era un objetivo que perseguía hacía más de una década. Estuvo cerca con la final perdida ante Banfield en 1993 y lo consiguió en 1995 con la recordada final ante San Martín de Tucumán.
Lo que vino después se conoce de memoria, incluso con un descenso en 2014 pero que duró un suspiro, ya que en menos de seis meses el Sabalero volvió a Primera División.
El campeonato obtenido en 2021, la final de la Copa Sudamericana en 2019, la participación en la Copa Libertadores 2022 y otros eventos significantes que protagonizó Colón en la década del 90 y principios del nuevo siglo.
LEER MÁS: Por qué debería y por qué no debería seguir Osella en Colón
Todo ese pasado glorioso quedó atrás. Y Colón afronta un presente repleto de incertidumbre, en el que tendrá que arreglarse con un presupuesto mucho más acotado que el que tuvo este año.
Con menos recursos y muchas más obligaciones la dirigencia que comanda Víctor Godano carga en sus espaldas con una mochila de plomo que seguramente se hará muy difícil de trasladar.
El margen de error es cero y el futuro está lejos de ser asomar esperanzador. La crisis deportiva y las dificultades económicas azotan a la institución y aunque no es responsabilidad de los hinchas, serán los que una vez más tendrán que decir presente para ayudar a sacar a flote al club.
LEER MÁS: Qué ocurrió en la reunión de Comisión Directiva de Colón
Ahora más que nunca los hinchas y socios tendrán que sostener la institución, con su aporte mensual para que Colón pueda seguir funcionando.
Una vez más y como ocurre casi siempre, será el pueblo sabalero el que tenga que salir a socorrer a su querido y amado club de los desmanejos dirigenciales y los fracasos deportivos protagonizados por los jugadores y entrenadores.
Será clave que Godano y el resto de la comisión directiva sepan dónde están parados. Lo mismo aplica para el director deportivo Iván Moreno y Fabianesi.
LEER MÁS: En España sostienen que Garcés adelantará su salida de Colón
Que de una vez por todas, estén a la altura de las circunstancias. No son los únicos responsables, pero sí son los encargados de gestionar y tomar decisiones. Para eso, los socios los votaron y los respaldaron masivamente.
Será fundamental sentar los pilares de la reconstrucción y saber el camino a tomar. Colón afrontará un 2025 muy complicado e imprevisible. Quizás la única ventaja es que ya conoce con lo que se va a encontrar.
Por allí en este 2024 terminó subestimando la competencia, luego de lo que fue el rendimiento del equipo en esa primera rueda en la que finalizó primero.
LEER MÁS: El fracaso de Colón que en parte se explica por la falta de un goleador
Con la experiencia cosechada, tal vez sepa afrontar de mejor manera el torneo. Por lo demás, habrá que decir que las exigencias serán mayores y los recursos infinitamente menores.
Sin plata por cobrar y con juicios que asoman en el horizonte, la realidad es absolutamente compleja. Colón es un barco a la deriva y precisa de un capitán que conduzca con firmeza y claridad para enderezar el rumbo.
Los hinchas seguirán ahí porque el sentimiento no conoce de claudicaciones y estarán dispuestos a dar una mano. Pero el destino de Colón no puede estar en sus manos.
La dirigencia y el director deportivo tienen en sus manos el futuro de Colón. Una responsabilidad mayúscula que deben asumir, para no equivocarse en el armado del plantel y en la elección del entrenador.
LEER MÁS: Crecen las dudas sobre el futuro de Diego Osella en Colón
Este año que se está consumiendo les tiene que haber servido de aprendizaje para no volver a cometer las mismas equivocaciones. No pueden ni deben tropezar dos veces con la misma piedra.
En un año, Colón retrocedió 30, descendió de categoría, no pudo ascender y atraviesa una delicada situación económica y sin jugadores que pueda transferir para generar ingresos.
Colón se quedó sin capital deportivo y económico. Tiene por delante recorrer un desierto prolongado y del cual no se conoce el punto de llegada. Pero lo que sí tiene que conocer urgentemente es el punto de partida.