Las estadísticas son alarmantes, los números no cierran y Colón se hunde en la tabla de puntos y también en la de los promedios. Y no es para menos, ya que la presente campaña es paupérrima, al punto tal de perder ocho de los últimos 10 partidos. Ganó apenas dos (como local) y sumó seis puntos sobre 30 con una eficacia del 20%.
Colón y sus números en rojo
En esa decena de encuentros, los triunfos fueron en el Brigadier López ante Godoy Cruz (peor equipo del torneo) y Estudiantes (sin merecerlo). Mientras que cayó como local con Atlético Tucumán, Aldosivi y Banfield y en condición de visitante frente a Unión, River, Vélez, Arsenal y Central Córdoba.
En los 10 encuentros, recibió 17 goles y apenas anotó ocho. A eso habría que sumarle que cayó en todos los cotejos que disputó afuera del Brigadier López. Y desde el 14 de mayo del 2018 que no gana como visitante. No caben dudas que se trata de una campaña de descenso, que aún no se traduce por la realidad de otros equipos.
LEER MÁS: Osella: "Hay que hacerse cargo y empezar a mostrar otra cosa"
Pero estos pésimos números, lo condicionan a Colón de cara al futuro, si la situación es complicada en esta temporada, ni hablar de la próxima en donde el Sabalero arrancaría con el peor promedio. No caben dudas que se dilapidó lo bueno que había conseguido bajo la conducción de Eduardo Domínguez cosechando un buen colchón de puntos.
Y producto de las cinco caídas al hilo, se convirtió en el peor equipo de la Superliga en los últimos meses. Todos números negativos que profundizan la crisis del Rojinegro y que deberá modificar de manera urgente si pretende mantenerse en Primera División.