Ramón Ábila fue el goleador de Colón en el Torneo de la Liga y quizás junto con Paolo Goltz son los dos jugadores con más trayectoria dentro del plantel sabalero. Cuando la dirigencia rojinegra lo contrató, sin dudas que generó una expectativa muy grande en los hinchas.
El 9 de Colón y una racha negativa a la que deberá ponerle fin
Y su arranque en Colón no fue como titular, ya que Julio César Falcioni se inclinaba por Lucas Beltrán, pero cuando este último retornó a River, Wanchope se ganó un lugar, hasta la llegada de Néstor Gorosito que cuando asumió lo puso en el banco los primeros cinco encuentros.
Luego Pipo decidió que sea titular ante Boca y al minuto de juego Ábila le pagó con un gol para el triunfo en la Bombonera y luego de ese compromiso, fue titular en los siguientes 13 encuentros que disputó el Sabalero. Terminó el Torneo anotando seis goles y siendo el máximo artillero del equipo.
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Sin embargo, en el arranque de la Copa de la Liga, como así también en la Copa Argentina, el DT sabalero se inclinó por Jorge Benítez relegando a Wanchope al banco Y cuando ingresó tampoco rindió en la medida esperada, fallando un penal ante Independiente. Su último gol fue el 29 de mayo en el empate ante Central Córdoba 2-2.
Lo cierto y concreto es que de estar todo el plantel a disposición, la sensación es que Ábila perdió terreno y así lo indican las estadísticas. Contra Independiente y Huracán ingresó a los 17' del segundo tiempo, mientras que con Gimnasia fue al banco y no entró.
Por su parte, en la Copa Argentina no ingresó contra Lanús y ante Talleres lo hizo a los 20' del complemento. Así las cosas, en este nuevo ciclo apenas sumó 81' minutos en cinco partidos, pero lo que es más preocupante aún, es que apenas marcó un gol en los últimos 15 partidos que jugó. Racha que ante el Canalla buscará cortar.