Si bien Colón había sufrido un bajón futbolístico y los resultados no se le daban, Ignacio Lago seguía siendo el jugador más determinante que tenía el equipo.
Ignacio Lago, el jugador distinto que Colón nunca logró reemplazar
Está claro la ausencia de Ignacio Lago repercutió de manera muy negativa en el equipo y Colón nunca logró reemplazarlo
Pero en la 26° fecha, en lo que fue la primera derrota de Colón como local ante Mitre de Santiago del Estero, el extremo sufrió la rotura de ligamentos cruzados de su rodilla izquierda.
Colón nunca logró reemplazar a Ignacio Lago
Y en consecuencia, se perdió los 12 partidos restantes para finalizar el campeonato. Colón jamás pudo suplir la ausencia de Lago, que claramente era el mejor jugador del equipo.
Hasta ese momento, Lago era el goleador del equipo con seis goles y tres asistencias. Y a pesar de que no estaba en su mejor momento, le sacaba una diferencia muy grande al resto de los volantes y extremos ofensivos.
La apuesta de la dirigencia por pedido de Iván Delfino de traer a Lago fue la decisión más acertada en el mercado de pases. Un jugador que no estaba en el radar de ningún equipo de Primera División y que fue una sorpresa por demás de positiva.
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La explosión y el desequilibrio en el mano a mano que mostró Lago, no lo tiene ningún futbolista del plantel. Y es por eso que ante la baja del ex-Talleres, Colón perdió sorpresa y verticalidad en ataque.
Lago jugó 28 partidos con la camiseta de Colón, 26 partidos en la Primera Nacional y dos por Copa Argentina. Y marcó siete goles, uno de ellos por Copa Argentina. Es decir, un promedio de un gol cada cuatro partidos.
Sin Lago en cancha, Colón disputó 13 partidos, ganó cuatro, empató cuatro y perdió cinco. Con una efectividad del 41%, en tanto que con Lago, el Sabalero jugó 26 encuentros, ganó 12, empató siete y perdió siete con una efectividad del 55%.