La ciudad de Santa Fe tuvo una representante de lujo en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, que se realizaron en Chile. Se trata de Ingrid Marcipar del Club Regatas de Santa Fe, quien tiene 19 años de edad, que además es estudiante de la carrera de Fonoaudiología de la Universidad Católica. La deportista oriunda de San José del Rincón, hizo historia que compitió en cuatro pruebas, el dos largo femenino sin timonel, el cuatro largos femenino sin timonel, el ocho remos largos femenino, y la gran sorpresa, que fue el ocho mixto.
Marcipar disfrutó de una de las experiencias más lindas

UNO Santa Fe
Ingrid Marcipar contó su experiencia en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023.
En la prueba en la que lleva más tiempo entrenando, el dos remos largos sin timonel, con el cual consiguió un cuarto puesto en el Sudamericano de Asunción en 2022, ocupó un quinto puesto, y en el cuatro remos sin timonel, consiguió un sexto puesto. En el ocho femenino junto a sus compañeras de la selección nacional, ocuparon la cuarta ubicación, y en cuanto al mixto ocho, finalizaron en el sexto lugar, resaltando que fue la primera vez en la historia que se compitió a nivel internacional.
"Las sensaciones con las que me volví de Chile, no voy a decir conforme, pero lo hice satisfecha, porque se que dejó todo. Pude dar todo lo que estuvo a mi alcance, con la preparación, ya hacía un año que remaba uno de los botes que fue en el que más contenta quedé. Uno que hace poco lo comencé a hacer en el cual me sorprendió para bien el resultado conseguido. Pero me dejó mucha motivación para seguir y mejorar aquellas cuestiones que creo que estoy en condiciones" comenzó señalando Ingrid Marcipar a UNO Santa Fe.
La remera de la selección nacional indicó que "en Santiago competí en cuatro pruebas, todas de remo largo, en 2 sin, 4 sin, 8 femenino y 8 mixto, todos en la categoría senior. En el 2 quedé quinta, e igualé los resultados del prepanamericano, en el 4 quedamos igual, y los dos ocho se corrieron por primera vez. En el femenino quedamos cuartas, a pesar que lo empezamos a remar relativamente hace poco, en relación a lo que lo hacen los otros equipos como Canadá y Estados Unidos. En el mixto, con toda las eliminatorias, pudimos de nueve botes terminar sextos, y lo empezamos a remar hace poco".
"Fue toda una experiencia, uno aprende mucho como reman los varones, ya que tienen otro tipo de pasada, te enseñan un montón, y eso lo pudimos trasladar a los botes chicos. La cuestión es que no solamente en cada prueba tenés la final, sino las eliminatorias y en algunos casos los repechajes. Es algo que te va desgastando, porque por ejemplo, en el 2 sin femenino, y el 8 mixto, tenían lo que es elminatoria, que pasaban el primero y segundo, y en el ocho el primero solamente. Ahí tuvimos que ir a un repechaje, había que entrar entre primera y segunda, por lo tanto es muy desgastante y exigente" destacó la deportista oriunda de San José del Rincón.
Agregó que "son dos tiradas más, son siete minutos y medio de estar con las pulsaciones a mil, los músculos te quedan llenos de ácido láctico, y te vas cargando. Hasta la cuarta regata, te vas sintiendo bastante bien, en la quinta ya comenzás a sentir el cansancio, y en las últimas se complica. Lo bueno, es que como era Panamericano, el Enard, y la Asociación, se ocupó que tengamos un kinesiólogo, que nos ayudó mucho en la recuperación, ya sea haciéndonos masajes, y todo para poder estar bien para la próxima prueba".
Un campeonato sin descanso
Hay que señalar que entre prueba y prueba no había mucho tiempo para descansar. El primer día tuve dos tiradas, con dos horas de diferencia, en la segunda jornada también dos tiradas, y fueron cinco días en continuado de regatas. La jornada que tuvimos menos regatas fue a mitad de competencia, que tuve la final del 2 sin, que fue la única que tuvimos ese miércoles, jueves tuve dos, y el viernes una".
Un Panamericano tiene la particularidad que muchos deportistas conviven en un mismo entorno, y esa sin dudas es una de las experiencias más lindas. Pero en el remo hay una situación, y la explicó la palista de Regatas de Santa Fe. "El remo tiene una cuestión y es que nosotros teníamos un lugar aparte. El Panamericano se realizó en Santiago, pero el remo se concretó en Concepción, que quedaba a unos ciento y algo de kilómetros. El surf estaban también en otro lado, y después, lo que eran otros deportes acuáticos, también estaban alejados porque en Santiago no había ningún espejo de agua".
Consideró que "en Concepción estaba Laguna Grande, que tiene las medidas reglamentarias perfectas, el pre-panamericano se realizó en dicho lugar. Ahora en el Panamericano se volvió a realizar allí mismo, entonces estábamos solamente los de remo. Cuando nos fuimos nosotros, a los dos días llegaron los de kayak, así que no nos pudimos ni cruzar. Utilizamos la misma pista pero con diferentes medidas".
Una exigente preparación
En relación a como fue la preparación para este Panamericano contó que "tuvimos un año muy exigente, tuvimos que hacer fondo de millonada de kilómetros, estuvo bueno que más llegando la fecha de competir en Chile, el grupo estaba más cerrado, fuimos quince días a concentrar a Posadas, también estuvimos un tiempo en Nordelta, porque la pista de Tigre, no es la mejor y está bastante contaminada. Después fuimos a Mendoza, entrenamos en Potrerillos, y de ahí nos fuimos a Chile, que estuvimos en Laguna Chica, porque no se podía ingresar a Laguna Grande, pero los locales si lo pudieron hacer...sin palabras".
En cuanto a lo que se viene, Ingrid detalló que "esta semana tendremos el Campeonato Argentino que lo voy a correr para mí club que es Regatas, y en cuanto a la selección, en diciembre, se va a realizar un selectivo para el preolímpico, y para los botes que van a correr en el Sudamericano del año que viene, que es Senior, y Junior, entonces voy a intentar clasificar para eso, y ver si me puedo meter en otras competencias, por lo que por ahora, la palabra vacaciones quedará en stand by".