Las fuertes ráfagas de viento del lunes hicieron que parte del embalsado que todavía se encuentra en los viejos pilotes del puente ferroviario se desprendieran.
El fuerte viento desprendió parte del embalsado y fue a parar a uno de los pilotes del Puente Colgante

Una porción de esa vegetación continuó aguas abajo y fue a parar a uno de los pilotes del Puente Colgante. Prevén que dicha vegetación, que ahora abraza a la base oeste del viaducto, se desprenda naturalmente.
Sin embargo, hay dudas sobre lo que podría ocurrir en caso de que más vegetación del embalsado se desprenda y culmine también en los pilotes del Colgante. Esa situación podría ocurrir a partir del movimiento que provocó las fuertes ráfagas de viento.
Cabe recordar que los trabajos para remover el embalsado en la laguna Setúbal comenzaron a principios de mayo. Los trabajos para retirar esa gran masa de vegetación, que dividía el espejo de agua en dos impidiendo el paso, estuvieron a cargo del Ejército Argentino.
La intervención fue clave para abrir un paso entre medio los pilotes del medio. Sin embargo, hasta la fecha, una gran cantidad de vegetación sigue abrazando a cuatro de los cinco pilotes del viejo puente ferroviario.
Ráfagas de hasta 60 km/h en la ciudad
A raíz de las fuertes rágagas de viento, el municipio recibió unos 30 reclamos. La mayoría fueron de postes caídos o por caer, cables y árboles
El fenómeno comenzó cerca de las 14 y pasadas las 19 permanecía en la región, aunque con menor intensidad.
La estación meteorológica que se encuentra en el CIC de F. Zuviria registró la máxima velocidad de viento a las 14:35 hs, con ráfagas que alcanzaron los 56.8km/h.
En las zonas periféricas a esta capital se alcanzaron a medir ráfagas de hasta 66 km/h. En ese sentido, el Aeropuerto de Sauce Viejo anotó vientos de hasta 68 km/h.
La impactante vegetación en costanera oeste
También llama la atención la tupida masa de vegetación que se formó sobre la Costanera oeste santafesina y que cambió drásticamente el paisaje. La arena de la playa donde los santafesinos pasean, toman mate y practican deportes, ya no se conecta con el espejo de agua, sino que da a la vegetación que se apropió del paso costero santafesino.
Pese a lo que podría creerse por la proximidad temporal y geográfica, esta "nueva" vegetación no esta vinculada con la del embalsado que obstruía el paso de la navegación a la altura del faro y fue removido entre mayo y julio de este año.
La Doctora en Ciencias Biológicas, Zuleica Marchetti, Aclaró que a diferencia del embalsado "en la costanera oeste ahora observamos una vegetación más de tipo palustre, o sea vegetación arraigada que está en lugares de muy poca profundidad y crecen entrelazada unas con otras. Lo que estaba en el embalsado en un 80% o 90% era la especie que en la zona conocemos como canutillo, y que es flotante, es un colchón de vegetación que flota. En las imágenes actuales vemos mucho catay, que es otra planta que preferentemente busca estos lugares de menos profundidad. Entonces, son dos situaciones completamente distintas".
Con respecto a si será un paisaje que los santafesinos deberán acostumbrarse a ver, o más bien una vegetación pasajera, Marchetti apuntó que "todo va a depender del fenómeno del Niño, si termina de llegar e instalarse. En tanto la altura del río se mantenga como está, ese tipo de situación se queda y de a poco eso se va terrestralizando. Pero el pronóstico es que, con un poco de retraso, el Niño finalmente llegue y se instale una temporada de lluvias copiosas. Por ende, se espera que el río levante su nivel y que inunde algunas áreas, entonces esa parte va a empezar a quedar bajo agua".