El 2023 comenzó con dos accidentes fatales en la ciudad de Santa Fe, con un trasfondo de años de lucha por concientizar sobre la prevención de siniestros viales que lleva adelante la agrupación "Estrellas amarillas Santa Fe", quienes pintan los distintivos en la calzada a pedido en los lugares en donde hubo víctimas fatales.
El primer accidente fatal del 2023 en Santa Fe fue sobre una estrella amarilla

Desde la organización y luego de lo que fue la trágica muerte del joven accidentado en Aristóbulo del Valle y callejón El Sable, donde ya había una estrella amarilla pintada, manifestaron su desazón.
En diálogo con UNO, la referente de la agrupación, Karina Ingrasciotta, puntualizó: "Esta mañana fue una mañana fatal, pero esto ocurre desde hace tiempo. Siempre se trata de concientizar y concientizar pero yo creo que nos falta muchísimo".
Cabe destacar que para que se pinte una estrella en la calzada siempre la tiene que pedir un familiar directo de quien falleció en el siniestro. Sobre esto, Ingrasciotta destacó: "Hace cinco años que estamos pintando dentro de la ciudad y también en rutas y llevaremos pintadas aproximadamente unas 500 estrellas. Tenemos más pedidos pero vamos a comenzar a pintar nuevamente en marzo. Nos pega muy fuerte que la gente no tome conciencia y que solo haya media sanción a la ley de alcohol cero".
30 estrellas en Aristóbulo del Valle
En relación a la cantidad de siniestros fatales ocurridos en todo el corredor de Aristóbulo del Valle, en toda esta avenida se llevan pintadas cerca de 30 estrellas, teniendo la esquina de Aristóbulo del Valle y Ángel Cassanello dos estrellas por reiterados accidentes.
Sobre esto, la referente de la causa puntualizó que desde Estrellas Amarillas se pidió en reiteradas ocasiones "que se solucione la falta de semáforos en la zona, poner lomos de burro, controlar la velocidad, realmente no se puede juzgar pero por lo que se ve que fue el siniestro hubo velocidad desmedida".
A su vez, desde la agrupación se destaca que "son todas estrellas pedidas pero sí hay algunas que son provocadas por personas alcoholizadas, no siempre es una víctima de un siniestro por culpa de otra persona. A veces es provocado por uno mismo y sobretodo por el uso del celular, el alcohol, falta de cinturón, falta de casco, chicos en la moto, etc".
"La gente tiene tomar conciencia de la importancia del conductor designado, se controla por ejemplo cuando se secuestran los vehículos pero a la semana siguiente ves las mismas motos circulando porque pagan para sacarlos y vuelven a reincidir. Hay una falta de respeto hacia la vida, hacia los inspectores, hacia la policía que tendrá sus fallas pero tampoco podemos poner un policía por cada persona. Si nosotros no somos capaces de cuidarnos entre nosotros estamos viviendo en la ley de la selva", concluyó Ingrasciotta.