La crecida del Paraná sigue siendo monitoreada por los diferentes organismos hídricos, aunque con la llegada del pico en las próximas horas en lo que tiene que ver con la costa santafesina, ya se pronostica un período de calma en el repunte del río hasta mediados de enero de 2024.
La crecida en Santa Fe alcanzó su pico y pronostican que "no habrá repuntes hasta la segunda quincena de enero"

Captura aérea de la costa de Santa Fe.
En esta cuestión, el último reporte operativo de sala diario emitido por el Instituto Nacional del Agua (INA) este lunes 27 de noviembre, anticipa que el pico de la crecida del Paraná en el Puerto de Santa Fe será alcanzado el día miércoles 29 de noviembre con mayor probabilidad, oscilando en un nivel de 4,70 y 4.90 metros.
UNO Santa Fe dialogó con el subgerente de Alerta Hidrológico del INA, Juan Borús, quien a propósito de la moderación de la crecida en la costa santafesina expresó: "Estamos transitando el pico ahora porque las lluvias que se esperan no serían suficientes como para producir una onda de crecida significativa como para que a este pico le siga otro. Lo que si puede ocurrir, y de lo que dependerá de donde se den las próximas lluvias, es que el retorno de los valores normales se retrase", afirmó el referente del INA.
"El río está en un rango menor al que habíamos pensado previamente, pero siguen afectando a dos aspectos de la vida santafesina. Primero en lo que tiene que ver con la ganadería de isla, se ha movido mucha hacienda y es razonable dado que no es una altura de extremo riesgo la que se está dando ahora pero con la altura suficiente para que moleste y para que haya muchos hacendados que no puedan sostener su hacienda en isla con estos niveles".
El otro aspecto que hizo mención el especialista es el de "la gente que vive en zonas bajas, que se ha trasladado y que se ha afincado cada vez mas cerca del río, con los cuatro años de bajante y sequía que hemos tenido. El río cada tanto toma sus tierras".
A propósito de las previsiones a mediano plazo, el experto destacó: "De cara a lo que viene lo que visualizamos en la composición de lugar visualizamos un "descanso", con una situación más aliviada durante diciembre y la primera quincena de enero. Seguramente en una reunión que tenemos con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) se va a redondear esa idea.
"Es una tendencia descendente en los niveles del río pero más acotada, sin nuevos picos significativos. Si tendremos estos picos más gradualmente con aportes de la alta cuenca del Paraná en Brasil a partir de la segunda quincena de enero", continuó Borús.
Consultado sobre las causas inmediatas de lo expuesto, Borús indicó: "Esto puede ser porque en la zona en donde se gestó la crecida, que es la zona de Misiones, sur de Paraguay y la cuenca no regulada del alto Paraná Brasil a la altura de la represa Itaipú, no solo los excedentes van rápidamente al río sino que además se están produciendo lluvias frecuentes ahí mismo".