Lolo, un bebé rosarino de 17 meses, sufre una cardiopatía congénita y se encuentra en emergencia nacional, necesita un trasplante de corazón. Su papá, Juan Pablo Accursi, en diálogo con Ahí Vamos en UNO 106.3 contó la lucha que llevan como familia contra esta enfermedad. Se vieron obligados a mudarse a Buenos Aires, ya que si aparece el órgano tienen que estar a solo 40 minutos del hospital.
La cruda realidad de un bebé rosarino que espera un trasplante de corazón

La cruda realidad de un bebé rosarino que espera un trasplante de corazón
"Hoy en Argentina hay 192.000 chicos que necesitan un órgano para seguir viviendo", detalló Juan Pablo. Sobre la enfermedad del bebé, expuso: "Vale queda embarazada y a los cinco meses de gestación en una ecografía nos dicen que ven una anomalía en el corazón. Vimos no menos de seis o siete cardiólogos y todos nos dijeron lo mismo, es una cardiopatía congénita de las más complejas, básicamente a una malformación del corazón, a Lolo le falta un ventrículo, el más importante, el izquierdo. Todos nos dijeron lo mismo, no puede nacer en Rosario, tiene que nacer en Buenos Aires porque a los pocos días va a tener que atravesar una cirugía".
Contó que el tratamiento consta de tres cirugías, apenas nace, a los seis u ocho meses y a los dos años. "Son operaciones paliativas como para darle una mejor calidad de vida. Lolo nació el 21 de marzo, el 25 lo operan, le dan el alta y a los dos meses vamos a Buenos Aires para programar la siguiente, se descompensa y esa misma noche lo operan de urgencia. Después de eso estuvo cinco, seis meses con constantes arritmias por las que cada 15 o 20 días estaba internado. Llegó a un punto de no retorno con las arritmias, no había medicación ni nada para sostenerlo", recordó.
"En octubre del año pasado le pusieron un marcapaso y en julio de este año en un control nos dijeron que veían el corazón muy dañado, con un desgaste muscular muy grande y nos plantearon que era irreversible. La siguiente cirugía no se la podíamos hacer porque no iba a poder pasar el posoperatorio y que la única alternativa es un trasplante", añadió.
Señaló que para que su hijo entre en emergencia nacional tenían que irse a vivir a Buenos Aires porque es el único lugar de Argentina donde se operan niños tan chicos del corazón es ahí. "Nos plantearon que tenía que estar a menos de 30 o 40 minutos de dónde se haga el trasplante, te llaman y te dicen «tengo tal órgano, dónde están», si estás en Rosario lo tienen que descartar. El corazón es el órgano que más rápido debe ser trasplantado a otra persona, tienen tiempo, creo que cuatro horas", detalló.
Accursi, resaltó: "Lolo podía entrar en lista de espera, pero no iba a llegar nunca su oportunidad, por su urgencia debía estar en emergencia y la condición para que lo pongan en esta es que esté cerca del hospital. El 9 de agosto entró en esta categoría y al día de hoy estamos a la espera, todas las noches soñamos ese llamado".