El balance de fin de año realizado por la Red de Vecinales por la Seguridad de Santa Fe arrojó aspectos positivos y negativos que marcaron la agenda del año en lo que tiene que ver con la ola delictiva en la ciudad, algunas cuestiones que sirvieron para mejorar indicadores y otros en los que llamaron urgentemente a actuar. En diálogo con UNO, la referente Susana Spizzamiglio dio la postura de las vecinales en un año que se termina y que trajo buenas y malas para el accionar territorial en pro de la seguridad.
La inseguridad en el foco de la Red de Vecinales: "Fue el cuento de la buena pipa"

Inseguridad en los barrios de la ciudad. Desde la Red de Vecinales por Seguridad se explayaron sobre la realidad actual al término del año.
Como aspecto positivo, Spizzamiglio destacó: "El 25 de noviembre nosotros realizamos un cierre que nunca es tal porque siempre tenemos que lidiar con el cuento de la buena pipa. Estábamos muy contentos cuando el gobernador sacó el decreto de control policial de motovehículos en abril y posteriormente se sancionó la Ley 14.281 que confiere protección a la víctima de delito por inseguridad, quienes van a tener una faz de defensa que antes no se tenía. El caso Brondino abrió esta posibilidad".
Pese a esto, los vecinalistas insistieron en que "es lamentable lo que está pasando en algunos barrios de Santa Fe. Si bien hay una disminución de delitos predatorios en la calle, arrebatos, etcétera, es solo ojear lo cotidiano para notar que abunda el robo a casas particulares y a comercios".
"Con el cuento de la buena pipa empezamos a tener inconvenientes. En Guadalupe otra vez empezaron las picadas sobre Av. Almirante Brown y pedimos al MPA que coloque a un fiscal sobre ese tipo de situaciones irregulares, controlando el código de convivencia. Si bien son contravenciones ante el desmadre de este tipo de inconductas terminan en una desgracia. Vamos a volver a insistir para que la fiscal intervenga en este sentido inclusive con áreas del municipio con inspectores, para hacer un control exhaustivo", declaró Spizzamiglio.
Sin caminantes
Realzando en su postura de disconformidad, desde la Red de Vecinales subrayaron que "o realmente se gestiona en cuestiones positivas, contundentes, persistentes, periódicas, combatiendo el delito o realmente estamos calentando silla cuando parece que lo que está bien se vuelve para atrás".
En los recorridos que realizaron las vecinales junto con el Ministerio de Seguridad en distintos barrios los vecinalistas destacaron que dejaron de funcionar los caminantes policías en la zona de barrio Barranquitas a lo largo de Av. López y Planes.
Sobre esto, expusieron: "Planteamos la «deserción» del binomio de policías que caminaban por López y Planes, lo que también trajo el cuento de la buena pipa porque lo que estaba funcionando bien se retiró, este fue el caso de los caminantes de López y Planes. Se produjo un relajamiento en esa zona de Barranquitas".
En relación a la situación de barrio Mariano Comas indicaron que "se habló con la GSI para que ellos puedan hacer una extensión de sus funciones en el control del territorio de la vecinal Mariano Comas. Incluso hay robos de automotores, ruedas, etcétera".