A dos meses de la asunción, las nuevas autoridades de la Asociación Argentina de Tenis realizaron una conferencia de prensa en la que compartieron detalles sobre la situación financiera de la institución. Su presidente, Agustín Calleri, destacó que al momento de tomar el mando, luego del triunfo en las elecciones del 3 de mayo, encontraron "un gran desorden económico y administrativo", aunque agregó: "Pero esto es justamente lo que nos da fuerzas para trabajar más que cuando empezamos en este camino".
"Encontramos un gran desorden"
En la mesa de la Asociación de Deportes Racionales, frente a un nutrido grupo de periodistas se sentaron, además, el vicepresidente primero, Mariano Zabaleta; el vice segundo, Tomás Lynch; el vice tercero, Jorge Cano; el vocal y miembro de la comisión de Copa Davis José Acasuso; el Secretario Administrativo, Omar Carballo, el Secretario Legal, César Francis; y el nuevo director del equipo de Desarrollo, Franco Squillari.
"Este un trabajo día a día, comprometido. Somos 23 en el Consejo Directivo, más toda la gente que está apoyando desde fuera. Además, estamos hablando con las federaciones nacionales e internacionales. Necesitamos un cambio cultural. Aún nos queda un largo camino por recorrer y no son cambios que se den de un día para el otro", agregó Calleri, quien luego cedió la palabra a otros dirigentes para abordar temas específicos.
Mariano Zabaleta valoró: "Tuvimos muchas reuniones con empresas nuevas que confían en esta gestión y quieren sumar. Tenemos capacidad de contactos y estamos trabajando con Play Patagonia para aumentar los ingresos y tener el dinero para que la AAT funcione. Y lo que queremos cambiar principalmente es no depender de la Copa Davis. Si aumentamos el número de socios, vamos a poder conseguirlo".
La complicada situación
Omar Carballo y César Francis fueron quienes más se explayaron sobre el tema central de la conferencia de prensa. El primero de ellos planteó: "Cuando asumimos, nos encontramos con una situación financiera complicada. No es algo de ahora; viene desde 2015, cuando se hizo el evento de Tecnópolis contra Serbia (por los cuartos de final de la Copa Davis). Ni el Gobierno de ese momento ni el actual pagaron los honorarios que tenía que compartir con la Asociación. Por lo tanto, la AAT tuvo que asumir una serie de costos, otros no pudo cumplirlos y por eso hemos tenido un embargo. Estamos a la espera de una resolución. A consecuencia de ello, la AAT en los últimos dos años tuvo que cobrar por adelantado algunos contratos y se ha producido un desfinanciamiento".
En la misma línea, Francis comentó que "el desorden y el informalismo sólo generan erogaciones superfluas de dinero", y agregó: "Paradójicamente, estamos felices de estar en esta coyuntura, porque entendemos que si no hubiéramos estado nosotros para pisar el freno, es posible que la AAT terminara colisionando".
El letrado detalló y enumeró algunos casos para graficar la cuestión jurídica: "Tenemos una previsión de reclamos judiciales que ronda los 13 millones de pesos, 7 por reclamos laborales y 6 por reclamos civiles y comerciales. Si pensamos que el giro ordinario mensual de la AAT está cerca de los 3 millones de pesos mensuales, estamos hablando de que en juicios y posibles pagos tenemos comprometidos lo que la institución necesita para funcionar durante 5 o 6 meses".
"Tomamos el tema de Tecnópolis. Si hubiéramos sido gobierno en ese momento lo hubiésemos manejado de otra manera, pero estamos peleando para que la Asociación pueda hacerse de ese dinero con acciones judiciales", continuó Francis, y agregó que la AAT se encuentra bajo inspección de la IGJ por incumplimientos y omisiones de la gestión anterior, y que pronto se realizará una auditoría externa para conocer más detalles.