Unión pasó por segundo año consecutivo por Uruguay, jugando tres partidos y un panorama, si se quiere, diferente a 2023 en cuanto a la llega en tiempo y forma de sus refuerzos.
Las dudas y certezas que dejó la pretemporada de Unión
En este recorrido en el vecino país, en mayor o menor medida, el DT Cristian González pudo contar con un arquero (Thiago Cardozo), tres defensores (Valentín Fascendini, Bruno Pittón y Miguel Torrén) y un delantero (Lucas Gamba).
Con el equipo lejos de la capital provincial, los dirigentes abrocharon al pibe Simón Rivero (volante, a préstamo de Boca) y el volante central (Mauro Pittón, compra del pase).
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Restan dos jugadores que de acuerdo a lo dicho por el orientador tendrían que conocerse en breve y darle forma a este plantel, que arranca abajo en los promedios y que desea cambiar la cara y los objetivos en la Copa de la Liga.
Lo bueno y lo malo que se vio en Montevideo
Cardozo brindó seguridad y ratificó que es atajador de penales. Unión puso el ojo en alguien de jerarquía para sustituir a Moyano. Si bien Campisi siempre le rindió al Tate, uno imagina que el Charrúa comenzará atajando en Avellaneda.
La defensa, con la llegada de Torrén y la jerarquía que le dio Corvalán el año pasado, tiene dos intérpretes asegurados. La lesión de Bruno Pittón frenó el deseo de Kily, y Vera, en caso de no ser vendido, seguramente le sacará ventaja a Gerometta.
En la mitad de la cancha, de acuerdo a lo observado con Nacional, Defensor Sporting y Universidad César Vallejo, el técnico tatengue sabe que los que pueden tratar bien el balón y asociarse con la línea de ataque son Enzo Roldán y Mauro Luna Diale.
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Uno viene de una lesión larga y otro, con vaivenes el año anterior. Pareciera que Joaquín Mosqueira está solo en esa incógnita de saberlo acompañado y si es así, por quién. De los pibes que subió el estratega, interesantes minutos de Lionel Verde. Para tener en cuenta.
Y las dudas más grandes que Unión volvió a mostrar en Uruguay son las terminaciones. Allí, los delanteros tienen un rol fundamental y refrendar, al menos en la previa, viejos errores que pusieron al equipo al borde del descenso.
Entonces, con un gol de tiro libre (Tiago Banega) y otro de penal (Enzo Roldán) en tres partidos, con chances creadas (no muchas) pero dilapidadas, es ahí donde debe seguir insistiendo el entrenador.
Unión prestó a Tomás González y Daniel Juárez a elencos del ascenso; Jerónimo Dómina está en proceso de recuperación, sabemos lo que puede aportar Lucas Gamba. El resto: Gonzalo Morales, Nicolás Orsini, Mariano Meynier, tuvieron sus minutos y por ahora no arrancan.
El Tate estará impecablemente preparado en la parte física, podrá hacer, como lo hizo, esa presión alta para soprender al rival. El tema es con tenencia de balón y campo a favor, de una vez por toda, empezar a concretar para ganar en las áreas y sumar en la tabla.