El fútbol siempre da revancha, y Marcos Díaz acaba de aprovechar la suya en el momento más delicado para Colón en la Primera Nacional.
Marcos Díaz aprovechó su chance y tuvo su redención en Colón
Marcos Díaz tuvo su retorno soñado al arco de Colón, ya que fue clave para sostener el cero, en dos momentos culmines del partido ante Talleres (RE).

José Busiemi.
El experimentado arquero, cuestionado por una seguidilla de errores puntuales en partidos clave, tuvo su gran regreso al arco en el triunfo ante Talleres de Remedios de Escalada, donde respondió con dos atajadas decisivas que le devolvieron la confianza.
La revancha de Marcos Díaz en Colón
Díaz había perdido su lugar tras fallas determinantes en las derrotas ante Almirante Brown, Gimnasia de Jujuy, Agropecuario y San Telmo, además de un empate ante Gimnasia de Mendoza en el que también fue protagonista negativo.
Con la llegada de Andrés Yllana al banco sabalero, Tomás Giménez se mantuvo bajo los tres palos, sin cometer errores, aunque sin dar ese salto de jerarquía que el cuerpo técnico buscaba para un tramo caliente del torneo.
Una apuesta que dio sus resultados en Colón
Yllana esperó hasta el tercer partido de su ciclo para cambiar. Y fue ahí, en la victoria ante Talleres, donde Marcos Díaz tuvo su revancha. En un partido cerrado, tenso y con Colón jugándose mucho, el arquero tuvo una actuación sobresaliente: primero al final del primer tiempo, cuando descolgó un tiro libre que se metía en el ángulo; y después, en tiempo cumplido, tapando un mano a mano clave con el marcador 0-0. Esa atajada fue el preludio del gol agónico de Federico Jourdan, que selló una victoria crucial para el equipo santafesino.
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La apuesta por la experiencia pesó más que la prolijidad de Giménez. Sin ser culpable en los partidos anteriores, el mendocino dejó su lugar ante la necesidad de liderazgo en el fondo. Y Marcos Díaz respondió como lo hacen los que conocen la presión y supieron superarla.
Con el arco nuevamente en sus manos y el equipo en plena lucha por levantar el nivel, Díaz se perfila como una pieza clave para lo que viene. Su regreso no solo trajo seguridad, sino también un mensaje claro: todavía tiene mucho que decir.